"Vida: Memorias de Keith Richards" es un viaje sin filtros a través de la vida de uno de los iconos más emblemáticos del rock and roll. Coescrito con James Fox, este libro es una oda a una vida vivida al límite. Desde sus humildes comienzos en Dartford hasta su ascenso a la fama mundial con los Rolling Stones, Richards no deja detalle sin contar. Su narrativa cruda y honesta captura la esencia de una era definida tanto por su música como por su notoria rebeldía.
El libro arranca con una anécdota de 1975, cuando Richards es detenido por la policía en Arkansas durante una gira norteamericana, un preludio perfecto que establece el tono de sus numerosos encuentros con la ley. A través de las páginas, nos lleva de vuelta a su niñez, compartiendo recuerdos vívidos de los personajes que moldearon sus primeros años, especialmente su abuelo Gus, quien le enseñó los primeros acordes en la guitarra.
Richards narra con detalle cómo la música lo atrapó completamente, desde su formación inicial en arte hasta el encuentro fortuito con Mick Jagger en una estación de tren, un momento que cambiaría sus vidas para siempre. La formación de los Rolling Stones se describe con una intensidad palpable, mostrando el hambre de los jóvenes músicos por el éxito y cómo la incorporación de cada miembro, incluido Charlie Watts, fue crucial para el sonido que eventualmente los catapultaría a la fama mundial.
Además de los triunfos y la música, Keith Richards no esquiva los aspectos más oscuros de su vida. Su tumultuosa relación con Anita Pallenberg, su batalla contra la adicción a las drogas y los desafíos constantes con Mick Jagger son expuestos con una sinceridad brutal. A lo largo del libro, también se entretejen encuentros con figuras legendarias como John Lennon, Eric Clapton y Bob Marley, proporcionando un vistazo fascinante a la interacción entre titanes de la música.
"Vida" no es solo para los fanáticos de los Rolling Stones o los aficionados al rock; es una obra maestra de la literatura musical que ofrece una mirada sin precedentes a la vida de un hombre que definió una generación y que, a pesar de todos los desafíos, nunca dejó de tocar su guitarra. Con una prosa que es tan afilada como uno de sus riffs, Richards entrega una autobiografía que es tan enérgica y duradera como su música.
