"Feliz cumpleaños, te quiero" de Eduardo García es una novela vibrante y conmovedora que narra la peripecia de Ricardo, un joven dominicano que, en el día de su vigésimo quinto cumpleaños, decide revelar su orientación homosexual a las personas más cercanas de su vida. Este anuncio, lejos de ser un mero trámite, se convierte en una odisea de emociones, malentendidos y episodios hilarantes.
La historia se despliega en un solo día, pero en él, Ricardo se enfrenta a situaciones que ponen a prueba su valor y su sentido del humor. Desde la impactante revelación a sus tradicionales padres, pasando por las reacciones de sus mejores amigos y, lo más complicado, su novia, quien no sospecha la verdadera orientación de Ricardo. Cada encuentro es un microcosmos de la sociedad latinoamericana contemporánea, con sus prejuicios, su calidez y su inconfundible chispa caribeña.
La narrativa de García es ágil y llena de ironía, utilizando un elenco de personajes secundarios que parecen sacados de una comedia de enredos. Estos personajes, que van desde el estereotipo hasta lo ridículo, no solo aportan humor, sino que también reflejan distintos aspectos y reacciones ante la homosexualidad en el contexto latino. El autor logra un equilibrio perfecto entre la crítica social y el entretenimiento, manteniendo al lector en un constante vaivén emocional.
Además de ser una historia sobre la aceptación y la búsqueda de identidad, "Feliz cumpleaños, te quiero" es un retrato fiel de la diversidad cultural y sexual de América Latina. A través de la travesía de Ricardo, García invita a reflexionar sobre la libertad personal, la honestidad con uno mismo y el amor en sus múltiples formas. El desenlace, inesperado y profundamente humano, no solo sorprende, sino que también deja una marca de esperanza y celebración de la diversidad.
Esta novela no solo es recomendada para aquellos interesados en temas LGBTQ+, sino para cualquier lector en busca de una historia que combine humor, drama y una visión sincera sobre los desafíos de ser fiel a uno mismo en un mundo que aún está aprendiendo a aceptar la diferencia. Eduardo García, con su estilo fresco y directo, promete hacerte reír, reflexionar y, sobre todo, disfrutar de una lectura inolvidable.
