'Tres enigmas para la Organización' de Eduardo Mendoza es una novela que se sumerge en el arte del humor literario para explorar las peripecias de una agencia de espionaje tan inútil como hilarante. Al centrarse en las trivialidades de lo cotidiano con un tono jocoso y una mirada crítica, Mendoza despliega un relato que es tanto una sátira social como una parodia del género de espías.
La trama se desarrolla en Barcelona, con un desvío ocasional a Palamós, y gira en torno a la Organización, una agencia de espías olvidada y subfinanciada, que ha conseguido sobrevivir en la sombra precisamente por su irrelevancia. Los miembros de esta peculiar institución se ven envueltos en la tarea de justificar su existencia y, por ende, su financiación. Para ello, se embarcan en la misión de conectar tres eventos aparentemente inconexos: la muerte misteriosa de un hombre en un hotel de las Ramblas, la desaparición del dueño de un yate de lujo en el puerto de Barcelona, y el extraño caso de una marca de conservas de pescado que no ha aumentado sus precios.
La novela utiliza estos enigmas como vehículos para explorar el absurdo de la burocracia y la futilidad de una organización que busca desesperadamente relevancia en un mundo que ha evolucionado más allá de su utilidad. Mendoza juega con la ironía y el contraste entre la grandiosidad con la que se perciben los miembros de la Organización y la trivialidad de sus misiones. Esta discrepancia sirve como fuente constante de humor y crítica a las instituciones obsoletas que pueblan el paisaje moderno.
Los personajes son tan variados como coloridos, incluyendo a los desafortunados espías, los sujetos de sus investigaciones y un taxista que ofrece una perspectiva externa y terrenal a los ridículos vaivenes de la trama. Cada figura aporta una dimensión cómica o absurda adicional al relato, enriqueciendo la narrativa con sus peculiares perspectivas y reacciones.
En conclusión, 'Tres enigmas para la Organización' es una obra que celebra el humor en la literatura, defendiendo su lugar como género no menor sino como uno capaz de ofrecer profunda crítica y reflexión social. Eduardo Mendoza, a través de esta novela, no solo entretiene sino que también invita a los lectores a cuestionar las estructuras y valores que dan forma a nuestras sociedades.