En "Come prima", una novela gráfica de Alfred galardonada con el Fauve D'or al Mejor Obra en el Festival de Angoulême 2014, los hermanos Fabio y Giovanni emprenden un emotivo viaje a través de la Europa de principios de los años 60. Con las cenizas de su padre recientemente fallecido, estos hermanos de personalidades opuestas se ven forzados a compartir la intimidad de un pequeño Fiat 500 en su viaje desde Francia hasta Italia, su país natal que dejaron atrás hace mucho tiempo.
La travesía no solo es física, sino también emocional y retrospectiva. A medida que avanzan, los conflictos y los silencios entre ellos se entremezclan con recuerdos y reencuentros, construyendo un retrato cada vez más claro del padre que perdieron y de las heridas que su ausencia dejó en cada uno. Este viaje se convierte en una oportunidad para enfrentar un pasado doloroso y para reconciliar las diferencias que los habían distanciado durante años.
Alfred utiliza el contexto del viaje en carretera para explorar temas universales como la familia, el luto y la reconciliación. La narrativa gráfica, con su estilo evocador y expresivo, capta la esencia de la época y del paisaje mediterráneo, sumergiendo al lector en una atmósfera nostálgica y melancólica. La novela no solo es un homenaje a la figura paterna y a la cultura italiana, sino también un examen introspectivo de las relaciones fraternales y de cómo los lazos familiares pueden trascender las adversidades del tiempo y del espacio.
"Come prima" es una obra conmovedora que balancea hábilmente la nostalgia, el humor y el drama, haciendo de este viaje en un viejo Fiat 500 una metáfora de la vida misma, con sus baches, desvíos y momentos de inesperada belleza. Con esta novela gráfica, Alfred no solo cuenta una historia, sino que también invita a una reflexión sobre el perdón y la aceptación, sobre cómo el pasado moldea, pero no tiene por qué determinar, nuestro camino a seguir.
