En "Palabras que nunca te dije", María Martínez nos sumerge en la vida de Sara, una mujer a punto de cumplir treinta años, atrapada en un matrimonio que se desvanece y ha perdido la chispa de los sueños de su juventud. Desilusionada y desconectada de sí misma, Sara se encuentra en un punto crucial de su vida. Sin embargo, un giro inesperado la espera cuando su mejor amiga, Christina, le pide que se encargue de la renovación de un antiguo Château en un tranquilo pueblo de La Provenza, con planes de transformarlo en un hotel.
Por otro lado, encontramos a Jayden, un hombre que, tras siete meses en el pueblo de Tullia, aún lucha con los demonios de su pasado. A pesar de sus conflictos internos, Jayden se ha ganado el cariño y la confianza de los vecinos, ayudándoles con diversas reparaciones y mostrando una personalidad amable y encantadora. La vida de Sara y Jayden se entrecruzan por una serie de casualidades, o tal vez por el destino, en un momento en que ambos más necesitan de alguien que comprenda su dolor y su soledad.
A lo largo de un verano mágico, entre campos de lavanda y noches iluminadas por estrellas fugaces y luciérnagas, Sara y Jayden descubren en el otro una razón para sanar y esperar. Juntos, exploran la posibilidad de una segunda oportunidad en la vida, aprendiendo que a veces el amor verdadero requiere lucha y paciencia. "Palabras que nunca te dije" es una conmovedora historia de amor y redención, que nos enseña sobre la importancia de enfrentar nuestros miedos y la fuerza que se puede encontrar en la conexión humana.
Aunque algunos lectores puedan encontrar la trama algo predecible y lenta, la novela ofrece una bella y entretenida exploración de la superación personal y el poder transformador del amor en las circunstancias más inesperadas. Es una lectura ideal para aquellos que disfrutan de historias de amor con profundidad emocional y personajes que evolucionan y aprenden a vivir de nuevo.
