"La fábrica de las sombras" de Ibon Martín es un thriller que teje una red de misterio y suspenso en el escenario gélido de la selva de Irati, en el norte de Navarra. La historia arranca con un hallazgo macabro: una joven es encontrada ahorcada en los arcos de la antigua Real Fábrica de Armas de Orbaizeta, aparentemente un suicidio. Sin embargo, la trama se complica cuando Leire Altuna, una escritora con una habilidad especial para resolver misterios, es contratada para investigar el caso.
Leire se ve sumergida en un ambiente hostil y enigmático en un remoto pueblo con apenas una docena de habitantes, donde descubrirá que las apariencias engañan. Las investigaciones de Altuna la colocan en el punto de mira de un peligro desconocido, mientras intenta desentrañar una serie de viejas traiciones y devastadores secretos familiares que algunos preferirían mantener ocultos. A medida que avanza su búsqueda, el río que serpentea por el pueblo vuelve a teñirse de sangre, añadiendo urgencia a su misión.
Ibon Martín crea una atmósfera cargada de tensión, con una narrativa que se desplaza ágilmente entre los oscuros años del contrabando en la frontera y un presente lleno de sombras. El autor construye una trama llena de pistas falsas y mitos locales que mantienen al lector en vilo hasta el último momento. "La fábrica de las sombras" no solo es un thriller psicológico, sino también un estudio de los miedos más profundos que anidan en los corazones humanos y cómo el pasado nunca cierra completamente sus puertas.
Esta novela es la segunda entrega de la trilogía "Los crímenes del faro", donde Martín vuelve a demostrar su habilidad para el suspense y la creación de atmósferas intensas y evocadoras. Aunque algunos lectores pueden encontrar la trama algo lenta en comparación con su obra anterior, "El faro del silencio", la resolución del misterio es compleja y satisfactoria, haciendo de "La fábrica de las sombras" una lectura recomendable para los amantes del género. Con un escenario bien delineado y un ritmo que acelera hacia un final impactante, esta novela confirma a Ibon Martín como un maestro del thriller contemporáneo.