En la obra "Dentro de la Tierra" de Paco Bezerra, nos adentramos en el ambiente opresivo y misterioso de un vasto invernadero en España, donde una familia se dedica al cultivo meticuloso de tomates, buscando alcanzar la perfección en su cosecha. El patriarca de la familia, aquejado por una enfermedad terminal, se enfrenta a la tarea de dividir su legado entre sus tres hijos. Con la ayuda de su hijo mediano, intenta ver florecer su último gran proyecto, mientras que misterios oscuros comienzan a emerger con la muerte en circunstancias extrañas de la matriarca y la peculiar enfermedad de la piel que sufre el hijo mayor.
Indalecio, el hijo menor, se ve marginado por su familia y se refugia en sus propios pensamientos y en Farida, una trabajadora del invernadero que insinúa que hay desapariciones inexplicables en el lugar. La obra, que oscila entre la realidad y la ficción, explora la obsesión de Indalecio por desentrañar los secretos que, según él, oculta su familia y el terreno que trabajan. Este conflicto familiar se intensifica, llevando a los personajes a un punto de no retorno, donde la cordura de Indalecio es cuestionada tanto por su padre como por su hermano, mientras la trama avanza hacia una revelación que puede ser tan real como fruto de la imaginación del joven.
"Dentro de la Tierra" se mueve en un terreno que mezcla elementos de fábula y thriller, donde las fronteras entre lo real y lo inventado son difusas. Bezerra emplea un lenguaje simbólico y acotaciones expresivas para crear una atmósfera cargada de tensión y misterio. La obra plantea preguntas sobre los límites de la ficción para enfrentar la realidad, el arraigo a la tierra, y la pertenencia a la familia como un clan con tradiciones milenarias. A través de personajes como la curandera la Quinta y Mercedes, la narrativa invita al público a participar activamente en la resolución de la historia, dejando ciertos elementos abiertos a la interpretación personal.
Revisitando esta obra, se aprecia la evolución en la escritura de Bezerra y cómo "Dentro de la Tierra" marcó el inicio de una destacada trayectoria en la dramaturgia española contemporánea. A pesar de algunos personajes menos desarrollados, la obra se mantiene como un texto crucial que combina con habilidad el drama familiar con elementos de suspense y profundas reflexiones culturales y sociales, todo bajo la sombra inquietante de un invernadero donde no todo es lo que parece.
