En la obra "La vida breve" de Eugenio d'Ors, publicada inicialmente en la revista Blanco y Negro, nos encontramos ante una serie de crónicas que capturan la esencia de la vida social y cultural madrileña de los años veinte. Escritas con el seudónimo "Un Ingenio de esta Corte", estas narrativas transportan al lector a una época de glamour y efervescencia cultural, donde los personajes de la alta sociedad desfilan por las páginas con una elegancia y un desenfado que solo d'Ors podría plasmar con tal maestría.
La selección de crónicas de d'Ors se centra en unas vacaciones de verano durante 1925, que no solo ofrecen un retrato vívido de la época, sino que también introducen al personaje de Sijé, quien más tarde se convertiría en protagonista de una de sus novelas. A través de estas "hojas del carnet", como gustaba llamarlas el autor, se nos revela un mundo donde lo cotidiano se entrelaza con lo extraordinario, mostrando desde las actividades cotidianas de los madrileños hasta eventos culturales como exposiciones y conciertos.
Resulta fascinante cómo d’Ors utiliza estos escritos para ofrecer una crítica sutil pero penetrante de la sociedad de su tiempo. Cada crónica, cargada de ironía y agudeza, es un espejo de las idiosincrasias y las pretensiones de una clase social que el autor conoce y retrata desde dentro. A través de sus viajes, que también documenta en estas páginas, el lector se convierte en un acompañante más de sus exploraciones por distintos rincones de España y Europa, percibiendo las texturas, colores y sonidos que d'Ors describe con tal vivacidad.
El personaje de Sijé, mencionado por primera vez en la crónica del 30 de agosto y despedido el 25 de octubre, simboliza la transición de la voz a la presencia corpórea, un tema que d'Ors exploraría más adelante en profundidad. Esta caracterización inicial sienta las bases para lo que eventualmente se convertiría en una figura central en la serie "Las Oceánidas", donde Sijé y otros personajes exploran distintas facetas del Eterno Femenino.
"La vida breve" no es solo un registro del día a día de una elite, sino una obra que captura el espíritu de una época y de un estilo de vida con la profundidad y el ingenio característicos de Eugenio d'Ors. Es un testimonio imprescindible para entender no solo la sociedad de aquel entonces, sino también la evolución del propio autor como cronista y novelista.