En "Dalí joven, Dalí genial", Ian Gibson nos invita a explorar los orígenes y la evolución temprana de uno de los iconos más fascinantes y polémicos del arte del siglo XX, Salvador Dalí. Este libro, escrito con un estilo accesible y dirigido a un público general, nos descubre no solo al artista, sino al hombre detrás del bigote y las excentricidades.
La narrativa comienza en la Ampurdán, la tierra natal de Dalí, donde Gibson detalla la influencia de su entorno familiar y regional en sus primeras etapas creativas. La historia avanza a través de su juventud, deteniéndose en ciudades clave como Barcelona y Madrid, donde Dalí se cruza con figuras de la talla de Federico García Lorca y Luis Buñuel, que jugarían papeles cruciales en su desarrollo artístico y personal.
La travesía sigue hasta París, el epicentro del movimiento surrealista. Es aquí donde Dalí se sumerge en el núcleo de este movimiento vanguardista, definiendo su estilo único que lo distinguiría por el resto de su carrera. Gibson hace un trabajo magistral al intercalar análisis de algunas de las obras más emblemáticas de Dalí durante este periodo, obras que, según el autor, nunca serían superadas en términos de creatividad y impacto.
Un momento decisivo en la vida de Dalí, narrado con detalle en el libro, es su encuentro con Gala, quien se convertiría en su musa y compañera por el resto de su vida. Este encuentro marca el inicio de una nueva fase en su vida y obra. Gibson capta la esencia de este cambio y cómo influyó en la trayectoria de Dalí, quien aspiraba a superar la fama de contemporáneos como Picasso.
"Dalí joven, Dalí genial" no solo es una crónica del crecimiento de un joven artista en uno de los más célebres del surrealismo, sino también una ventana a la personalidad compleja y a menudo contradictoria de Dalí. Gibson, con su hábil narrativa, nos presenta a un Dalí que es tanto un genio como un producto de su tiempo y circunstancias, un surrealista incluso antes de saberlo, como el propio Dalí afirmó en su emotiva entrevista con Gibson en 1986, poco antes de su muerte.
Este libro es, en definitiva, una obra esencial para entender no solo la evolución de Dalí como artista, sino también la transformación de un joven inquieto en un ícono global del arte. Con un relato bien documentado y una presentación amena, Gibson nos ofrece una perspectiva única del Dalí antes de que el mundo lo conociera como el Gran Exhibicionista.