En "Un libro libre", Miguel Gila nos invita a un viaje por un universo donde la guerra y la adversidad se enfrentan con el arma más inesperada: el humor. Publicado por Promoción Popular Cristiana en 1996, este libro no es una mera colección de chistes, sino un espejo de la sociedad y las guerras, vistas a través de los ojos de un humorista que transforma el dolor en carcajadas.
Gila construye un mundo peculiar en el que los adultos, pese a estar enfrascados en conflictos bélicos, se comportan como niños. Esta infantilización de los adultos sirve como crítica sutil a la absurdidad de los conflictos armados y a la vez desarma el poder destructivo de la guerra. Los personajes campestres y las “inocentes criaturas” que pueblan sus historias, con sus bromas a veces bestiales, nunca incitan al odio ni al horror. En su universo, no hay espacio para la maldad o la aversión; sólo existe un ambiente blanco, inocente y tierno, que invita al lector a desear la amistad con cualquiera de sus personajes.
La obra se convierte en un refugio de verdad y risa, donde la solemnidad, a la que Gila culpa de todas las desdichas humanas, es desterrada. Según el autor, si todos lográramos reírnos de nosotros mismos, el mundo sería un lugar sin guerras, violencia ni frustración. Este mensaje resuena a lo largo del libro y se refleja en la estructura de la obra, donde cada página es un testimonio de la lucha del autor contra la adversidad mediante la risa.
"Un libro libre" no solo divierte, sino que también ofrece una perspectiva profunda sobre la vida y obra de Miguel Gila, un autor que, a pesar de enfrentar pobreza, hambre y guerra, nunca dejó de hacer reír. En este sentido, el libro es tanto un testimonio de la resiliencia humana como una invitación a cambiar nuestra perspectiva sobre la vida y los conflictos que enfrentamos. En un mundo que pasa en un suspiro, Gila nos recuerda no tomar la vida con demasiada seriedad y, en su lugar, encontrar la liberación en la risa.