En "Aprendizaje o el libro de los placeres", una novela publicada en 1969 por la destacada autora Clarice Lispector, nos sumergimos en una exploración profunda y atípica sobre el amor y las relaciones de pareja. Esta obra se distingue por su enfoque único en el lenguaje y la forma, llevando al lector a territorios poco frecuentes en la narrativa convencional. Lispector, nacida en Ucrania pero con una vida desarrollada en Brasil, utiliza su voz distintiva para desafiar los límites del estilo literario, ganándose el título de precursora del modernismo en la literatura brasileña.
La novela narra la historia de Lori, una protagonista que experimenta un profundo viaje interior en su búsqueda por entender el amor y el placer en la vida cotidiana. A través de su relación con Ulises, un profesor de filosofía, Lori se enfrenta a sus propios miedos y deseos, aprendiendo a vivir plenamente y a aceptar la complejidad de sus emociones. La narrativa se enriquece con metáforas y reflexiones filosóficas que invitan al lector a cuestionar sus propias percepciones sobre el amor y la existencia.
Publicado por la editorial Siruela y traducido del portugués por Cristina Saenz de Tejada, "Aprendizaje o el libro de los placeres" es una obra que no solo cuenta una historia, sino que también desafía y expande la manera en que se percibe la literatura. La novela es un testimonio de la habilidad de Lispector para capturar la esencia del ser humano a través de un estilo que ella misma define como el "no-estilo", marcando una ruptura con las corrientes literarias de su tiempo.
Esta obra es ideal para los amantes de la literatura que buscan en los textos algo más que una simple narración. Es un libro que se saborea y se experimenta, provocando al lector a sumergirse en un estado de reflexión constante. Para aquellos interesados en una discusión más profunda, la CATA LITERARIA organizada por Eva Losada Casanova ofrece una oportunidad perfecta para explorar los temas del libro mientras se disfruta de un vino cuidadosamente seleccionado que complementa la experiencia de lectura.
Por último, el vino "Laya", elegido para acompañar la lectura de esta novela, refleja la fusión de complejidad y placer que Lispector plasma en su obra. Así como las uvas garnacha tintorera y monastrel se combinan para dar un carácter único a este vino, Lori y Ulises se entrelazan en una danza de emociones y aprendizaje, ofreciendo al lector un sorbo de vida a través de las páginas del libro.
