"La justa distribución de la riqueza mundial" de Luis María Anson, miembro de la Real Academia Española, es un libro provocador y esclarecedor que aborda uno de los problemas más acuciantes de nuestro tiempo: la desigual distribución de la riqueza a nivel global. Basándose en su extensa carrera como periodista y escritor, Anson utiliza su experiencia para explorar las profundas disparidades económicas que existen entre diferentes países y continentes, y propone soluciones audaces para este desafío del siglo XXI.
El libro comienza con un análisis estadístico alarmante que muestra la enorme brecha entre los países ricos y los países pobres. Anson cita ejemplos concretos como Burkina Faso y Níger, donde la tasa de analfabetismo es abrumadoramente alta en comparación con países como Suecia, Canadá o Australia, que tienen una tasa de analfabetismo prácticamente nula. Además, compara el PIB per cápita de Sierra Leona con el de Noruega, evidenciando una diferencia abismal que refleja la injusta realidad económica global.
El autor argumenta que esta desigual distribución de recursos no solo perpetúa la pobreza y el subdesarrollo, sino que también alimenta conflictos globales como la inmigración masiva y el terrorismo. Anson se apoya en las ideas del filósofo de la historia Arnold J. Toynbee, quien predijo que las guerras del futuro serían no convencionales, caracterizadas por estos mismos fenómenos. Según Anson, la solución no radica en la caridad o las subvenciones temporales, sino en una reforma estructural que incluya un sistema de impuestos globales donde las naciones más ricas contribuyan de manera justa al desarrollo de las naciones más pobres.
La propuesta de Anson no es solo económica, sino también profundamente ética y política. Él invoca los principios de solidaridad y justicia social que fueron promovidos por figuras como Juan XXIII y Juan Pablo II, quienes también abogaron por una distribución equitativa de la riqueza, tanto a nivel nacional como global. Asimismo, critica el egoísmo nacional y los escándalos corporativos que han explotado la globalización para eludir responsabilidades fiscales y sociales.
En "La justa distribución de la riqueza mundial", Luis María Anson no solo diagnostica los problemas actuales, sino que también ofrece un marco visionario para un futuro más justo. El libro es una llamada urgente a repensar cómo los recursos mundiales son compartidos y gestionados, abogando por un nuevo orden económico que garantice la paz y la prosperidad para todas las naciones del planeta.