En "Crematorio", Rafael Chirbes nos sumerge en un entramado de vidas cruzadas marcadas por la corrupción y la desilusión en la sociedad valenciana contemporánea. La novela se desencadena con la muerte de Matías Bertomeu, un antiguo revolucionario reconvertido en agricultor, cuyo fallecimiento actúa como catalizador, revelando las oscuras bases sobre las que se asientan las vidas de los personajes cercanos.
Rubén Bertomeu, hermano de Matías, es un constructor sin escrúpulos que ha prosperado a costa de la especulación inmobiliaria y la corrupción. Silvia, su hija, intenta desvincularse de las sombras familiares mediante su trabajo como restauradora de arte, aunque está casada con Juan Mullor, un catedrático empeñado en escribir la biografía de un amigo de la familia, Federico Brouard, un escritor alcohólico que encara el ocaso de su vida. Otros personajes como Ramón Collado, quien realizó los trabajos sucios para Rubén, y Traian, un mafioso ruso asociado con él, completan el cuadro de una sociedad corroída por dentro.
Chirbes no solo construye personajes complejos y profundamente humanos, sino que también ofrece un escenario donde el paisaje devastado se convierte en un símbolo de la destrucción moral y ética. La prosa de Chirbes es densa y rica, con largos párrafos que fluyen sin interrupción, reflejando la continuidad y la complejidad de los pensamientos y diálogos de sus personajes. A través de "Crematorio", el autor expone una visión crítica de la sociedad, donde el arte y la literatura parecen haber perdido su significado y valor frente a la omnipresente corrupción.
Esta obra, que se alinea con trabajos anteriores de Chirbes como "En la orilla", pero con una narrativa que algunos lectores pueden encontrar menos cautivadora, sigue siendo un poderoso retrato del realismo social. A pesar de ciertos comentarios que mencionan su densidad y la dificultad para conectar con la trama, "Crematorio" es un testimonio de la maestría de Chirbes en el arte de la narrativa y su capacidad para diseccionar la sociedad contemporánea.
En resumen, "Crematorio" no es solo una novela, sino un espejo crítico que refleja las más profundas inquietudes y corrupciones de nuestra era, todo ello envuelto en una prosa exigente pero profundamente reveladora.
