En "Las huellas imborrables", Camilla Läckberg teje una narrativa que entrelaza el misterio contemporáneo con un inquietante relato del pasado en la Suecia de los años 40. La historia comienza cuando Erica Falck, una escritora recién salida de su baja por maternidad, se encuentra sumergida en la investigación de un enigma familiar tras descubrir los diarios de su madre, Elsy, y una medalla nazi entre sus pertenencias. La relación entre madre e hija siempre fue complicada, y estos hallazgos solo añaden más preguntas sobre el pasado de Elsy.
Paralelamente, en la tranquila localidad de Fjällbacka, el comisario Patrik Hedström, pareja de Erica y ahora a cargo del cuidado de su hija Maja, se ve involucrado en la investigación del asesinato de Erik Frankel, un historiador que se especializaba en la Segunda Guerra Mundial. La trama se complica cuando se revela que Erica había visitado a Frankel poco antes de su muerte, buscando información sobre la misma medalla nazi, lo que plantea la pregunta de si su visita podría estar vinculada al crimen.
A medida que Erica profundiza en la investigación, los secretos del pasado comienzan a desvelarse a través de intensos flashbacks que nos llevan a la Suecia de 1940, donde una joven enfrenta circunstancias que eventualmente conectarán con los eventos actuales. La historia alterna entre el pasado y el presente, explorando cómo las decisiones de una generación afectan a la siguiente.
La novela no solo es un thriller criminal, sino también una exploración de las relaciones familiares y los secretos que pueden moldear nuestras vidas. Aunque algunos lectores pueden prever el desenlace y encontrar los flashbacks algo densos, la narrativa generalmente mantiene el interés y proporciona una lectura envolvente. "Las huellas imborrables" es una adición intrigante a la serie Fjällbacka, ofreciendo una combinación de misterio policiaco y drama familiar que captura la atención hasta la última página.
