"Un ser de lejanías" de Francisco Umbral es una exploración profunda y poética de la pre senectud, donde el autor reflexiona sobre el inevitable alejamiento de las cosas y de uno mismo a medida que se avanza hacia el ocaso de la vida. Inspirado por la célebre frase de Heidegger, "El hombre es un ser de lejanías", Umbral ofrece una interpretación íntima y personal que se traduce en una obra lírica, arrebatada y rica en metáforas.
La narrativa de Umbral se caracteriza por un estilo extravagante y erudito, donde cada página es una digresión sobre la vida, el tiempo y la memoria. Con un sentido del humor feroz y una prosa que a veces recuerda al lirismo de Neruda, el libro se convierte en una experiencia sensorial que invita al lector a reflexionar sobre su propia existencia. Umbral nos lleva de la mano a través de fiestas, tareas y usos cotidianos, mientras él mismo se siente como un viajero que viene de muy lejos, desde las lejanías de su propia biografía que se agota a grandes pasos.
El autor nos hace partícipes de sus observaciones sobre el paso del tiempo y lo efímero de la vida, enfrentándose a la pérdida no solo de los años, sino también de la esencia de lo que fue y de lo que es. En este viaje introspectivo, la elegancia y la expansión de sus pensamientos nos recuerdan inevitablemente a "La casa sosegada" de Gala, aunque Umbral logra imprimirle un carácter más jet-set y cosmopolita a su obra.
A través de sus páginas, "Un ser de lejanías" no solo proporciona un placer inmenso al ser leído, sino que también inflama los sentidos con su riqueza poética y su aguda capacidad para capturar lo intangible del ser humano. Umbral nos ofrece una mirada sincera y conmovedora sobre la pre senectud, invitándonos a acompañarlo en su reflexión sobre lo que significa ser un "ser de lejanías". Esta obra es una invitación a contemplar la vida desde una perspectiva única y a encontrar belleza en el inevitable distanciamiento de las cosas y de uno mismo.
