"Borja Borgia" de Manuel Vicent es una obra que navega en las turbulentas aguas de la ambición y el placer, utilizando la infame familia Borgia como metáfora extendida para explorar la eterna lucha por el poder y sus consecuencias. A través de una narrativa que no busca fidelidad histórica, sino más bien una reflexión sobre los instintos más básicos y oscuros del ser humano, Vicent teje un relato que es tanto una crítica como una introspección de la naturaleza humana.
La figura de Maquiavelo, presentada como un psicoanalista de épocas y poderes, sirve de guía en este desfile de pasiones que Vicent compara con una parada militar. Los personajes, inspirados en los miembros de la familia Borgia, no son meros reflejos de sus contrapartes históricas, sino representaciones de las fuerzas que impulsan a los líderes a través de los siglos. El autor explora cómo las armas modernas, personificadas y casi autónomas en su diseño, son las nuevas herramientas de poder, sugiriendo que la tecnología ha absorbido y refleja la ambición y maldad humanas.
El libro se mueve entre lo simbólico y lo literal, usando elementos contemporáneos como el misil Patriot para discutir cómo las sociedades modernas continúan alimentadas y protegidas por los mismos impulsos que regían durante el Renacimiento. La dualidad entre la santidad y la traición, el placer y el crimen, se expone como las dos caras de una misma moneda sobre la que se toca el piano de la historia.
El enigma central del libro, "¿Quién toca el piano?", encapsula la búsqueda de Vicent por entender quién realmente maneja los hilos del poder y cómo estos se perpetúan en una danza macabra de ambición sin fin. El autor confiesa no haber encontrado una respuesta definitiva, lo que aporta un elemento de misterio y reflexión continua para el lector. El prólogo y el final, destacados como los puntos fuertes del libro, encapsulan el propósito de la obra: equiparar a los dirigentes de todas las épocas y reflexionar sobre la universalidad y la eternidad del poder y la corrupción.
En "Borja Borgia", Manuel Vicent ofrece no solo una narrativa intrigante sino también una profunda crítica filosófica sobre los pilares emocionales y psicológicos que sostienen a las sociedades y sus líderes, ayer y hoy. La obra es un espejo en el que se reflejan tanto los Borgia del pasado como los titanes de la era moderna, todos danzando al ritmo de las mismas pasiones ancestrales.