"No pongas tus sucias manos sobre Mozart" es una obra que amalgama la agudeza literaria y periodística de Manuel Vicent, reconocido tanto en el ámbito de la novela como en el periodismo cultural. Este libro, publicado por Debate y laureado con el premio César González Ruano de periodismo, se presenta como un compendio de ensayos y artículos, algunos inéditos y otros previamente difundidos, en los que el autor valenciano despliega su particular visión sobre diversos aspectos de la cultura y la sociedad.
En esta obra, Vicent explora sus obsesiones más arraigadas, que incluyen desde la música clásica hasta la política, pasando por el arte y las vicisitudes de la vida moderna. El título del libro, "No pongas tus sucias manos sobre Mozart", es un claro indicativo del tono crítico y protector que Vicent adopta respecto a las manifestaciones del genio humano en un mundo que, a menudo, parece despreciar la profundidad y la belleza en favor de lo efímero y lo comercial.
La figura de Mozart, representativa del virtuosismo y la pureza artística, se convierte en un símbolo a través del cual Vicent critica la banalización y la mercantilización de las artes. Los textos reunidos en el libro son variados en forma y contenido, pero todos ellos comparten un hilo conductor: la defensa de la cultura y el arte como elementos esenciales y elevados de la experiencia humana, que deben ser preservados de las influencias corruptoras de la modernidad.
Con un estilo irónico y a veces mordaz, Manuel Vicent dibuja en "No pongas tus sucias manos sobre Mozart" un retrato de la sociedad contemporánea, donde se entremezclan la admiración por la grandeza del pasado y un análisis crítico de las tendencias actuales. El libro no solo es un testimonio de la erudición y el compromiso del autor con los valores culturales, sino también una invitación a reflexionar sobre cómo interactuamos con el legado artístico y cómo podemos protegerlo en un mundo en constante transformación.
Este texto se convierte así en una obra esencial para los amantes de la cultura y para aquellos que buscan comprender las tensiones entre tradición y modernidad, entre el arte como expresión sublime del espíritu humano y su conversión en mero objeto de consumo. Manuel Vicent ofrece, una vez más, una obra que es tanto un deleite literario como un agudo comentario social y cultural.