En "Los hijos del diablo", una novela de ciencia ficción de Peter Dickinson, nos sumergimos en una Inglaterra futurista, transformada y desconocida. La historia tiene lugar en un período conocido como los Cambios, una era donde la sociedad ha desarrollado una aversión intensa y violenta hacia las máquinas y la tecnología, llevando al país a un estado de regresión tecnológica y caos social.
La trama sigue a Nicky Gore, una joven valiente que intenta sobrevivir en este mundo hostil donde las máquinas son destruidas y la electricidad es vista como obra del diablo. Tras la desaparición de sus padres, Nicky se ve forzada a huir de su hogar en Londres, encontrándose con un grupo de niños que también han sido marginados por la sociedad. Juntos, deben navegar un paisaje peligroso y repleto de supersticiones y fanatismo.
A medida que avanzan, descubren una comunidad que ha adoptado un estilo de vida preindustrial, liderada por un carismático y misterioso líder que predica sobre la pureza y la necesidad de erradicar toda tecnología. Sin embargo, Nicky pronto empieza a cuestionar las verdaderas intenciones de este líder y su conexión con los eventos sobrenaturales que han llevado al país al estado de los Cambios.
Con un enfoque en la resistencia y la búsqueda de la verdad, "Los hijos del diablo" no solo es una aventura emocionante, sino también una exploración profunda sobre cómo el miedo y el rechazo al cambio pueden transformar sociedades. Dickinson teje una narrativa cautivadora que desafía a los lectores a reflexionar sobre la tecnología, el poder y la ética en un mundo que podría muy bien ser el nuestro si los miedos modernos se dejasen sin control.
Este libro es una obra intrigante que mezcla elementos de ciencia ficción con críticas sociales, haciendo de "Los hijos del diablo" una lectura esencial para aquellos interesados en las dinámicas del poder y la tecnología en la sociedad. Con su rica ambientación y personajes complejos, Peter Dickinson nos ofrece una historia que es tanto una advertencia como un espejo de nuestro tiempo.
