En "Olivia tiene cosas que hacer", la aclamada autora Elvira Lindo nos sumerge en el mundo de una niña pequeña llamada Olivia quien, tras despertarse de una siesta, se encuentra en un estado de ánimo particularmente caprichoso y malhumorado. Este libro, bellamente ilustrado por Emilio González Urberuaga, captura con encanto la esencia de la infancia a través de las travesuras y la imaginación desbordante de Olivia.
La historia comienza cuando Olivia, después de su siesta, exige que sea su madre quien le atienda en lugar de Juani, la asistente del hogar. Con su madre ausente por unos momentos, Olivia se siente abandonada y estalla en lágrimas. Sin embargo, su tristeza pronto da paso a la curiosidad y decide que debe ocuparse haciendo algo divertido y emocionante para pasar el tiempo. Aquí es donde comienza la verdadera aventura.
Olivia se embarca en una serie de actividades lúdicas que van desde convertir su sala en un castillo de cojines hasta imaginar que su pequeño jardín es una vasta selva llena de animales exóticos. Cada actividad está llena de risas, aprendizaje y pequeñas lecciones sobre la independencia y la autogestión. A través de sus juegos, Olivia aprende a manejar su mal humor y a transformar su frustración en creatividad.
Este libro no solo es un viaje hacia el corazón de la imaginación infantil, sino que también es una herramienta para que padres y niños comprendan y gestionen mejor los cambios de humor que a menudo surgen en los más pequeños. Las ilustraciones vibrantes de Urberuaga complementan a la perfección el texto de Lindo, haciendo de este libro una obra atractiva para la vista y el corazón.
Destinado a niños de 3 a 5 años, "Olivia tiene cosas que hacer" es una celebración de la infancia, la imaginación y la capacidad de encontrar alegría en las cosas más simples. Con su narrativa sencilla pero poderosa, Elvira Lindo ofrece un relato encantador que es tan relevante para los pequeños lectores como lo es para los adultos que los acompañan en su crecimiento y aprendizaje.
