Arnaldo Calveyra nació el 23 de febrero de 1929 en Gobernador Mansilla, Entre Ríos, Argentina. Creció en un ambiente rural que más tarde influiría profundamente en su obra literaria. Durante su juventud, en 1943, comenzó sus estudios en Concepción del Uruguay, y posteriormente se trasladó a La Plata donde cursó estudios de filosofía en la Universidad de La Plata, marcando el inicio de su profundo interés por la literatura y la poesía.
En 1960, Calveyra obtuvo una beca que le permitió mudarse a París, un cambio que definiría el resto de su vida y carrera. En la capital francesa, se sumergió en un ambiente cultural vibrante y tuvo la oportunidad de relacionarse con figuras prominentes como Julio Cortázar, Alejandra Pizarnik y otros intelectuales de la época. Este período fue crucial para su desarrollo como escritor y dramaturgo.
Arnaldo Calveyra se casó en 1968 con Monique Tur y juntos tuvieron dos hijos, Beltrán y Eva. Su vida familiar se entrelazaba con su carrera literaria, manteniendo un equilibrio entre su rol como padre y su pasión por la escritura. Su primer libro, "Cartas para que la alegría", publicado en 1959, recibió elogios significativos, incluyendo la admiración de Carlos Mastronardi, lo que solidificó su reputación como poeta.
Calveyra exploró diversos géneros literarios a lo largo de su carrera. Publicó tanto poesía como teatro y novelas, destacándose obras como "Iguana, iguana", "El hombre del Luxemburgo" y "La cama de Aurelia". Muchas de sus obras fueron traducidas al francés y publicadas por la editorial Actes Sud, lo que le ganó un reconocimiento considerable en Francia. Además, colaboró con el renombrado director de teatro Peter Brook, lo que amplió su influencia en el campo del drama.
Por su contribución a las artes y las letras, el gobierno francés lo condecoró en varias ocasiones, otorgándole títulos como Caballero, Oficial y Comandante en la Orden de las Artes y las Letras en los años 1986, 1992 y 1999, respectivamente. Estos honores reflejan la alta estima en la que se tenía su trabajo en Francia, su segunda patria.
Además de su éxito en Francia, Calveyra también fue reconocido en su Argentina natal y en el ámbito internacional. Recibió la prestigiosa Beca Guggenheim en el año 2000 y el Premio Konex - Diploma al Mérito en 2014, consolidando su lugar como uno de los autores más destacados de su generación.
Arnaldo Calveyra falleció el 16 de enero de 2015 en Argenteuil, Francia, a causa de un infarto agudo de miocardio. Su legado perdura a través de su extensa obra literaria y las numerosas vidas que tocó tanto en Europa como en América Latina. Su poesía y sus textos siguen siendo un testimonio de su profundo intelecto, su sensibilidad única y su capacidad para cruzar fronteras culturales y lingüísticas.
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