Gabriela Mistral, seudónimo de Lucila Godoy Alcayaga, nació el 7 de abril de 1889 en Vicuña, Chile. Desde joven se dedicó a la enseñanza y a la escritura, publicando sus primeros versos en 1904. A lo largo de su vida, combinó su carrera docente con la diplomacia y la literatura, destacando en cada una de estas facetas. Su obra poética, marcada por un profundo lirismo, aborda temas como el amor, el dolor, la maternidad y la naturaleza.
En 1914, Gabriela Mistral ganó el Premio Nacional de Poesía de Chile con "Sonetos de la muerte", obra que marcó el inicio de su reconocimiento literario. Trasladada a México en 1922, trabajó en la reforma educativa del país y publicó "Lecturas para mujeres". Su compromiso con la educación y la cultura la llevó a ocupar cargos en la Sociedad de Naciones y a viajar por Europa y América promoviendo la cooperación intelectual.
En 1924, su libro "Desolación" se publica en Estados Unidos, consolidando su estatura como poeta a nivel internacional. Gabriela Mistral continuó su labor diplomática y docente en Estados Unidos durante los años 30, donde también impartió clases en prestigiosas universidades. En 1938, publicó "Tala", obra dedicada a los niños víctimas de la Guerra Civil Española, y en 1945, recibió el Premio Nobel de Literatura por su aporte poético y humanístico.
Gabriela Mistral fue una defensora de los derechos de las mujeres y los niños y una promotora incansable de la cultura latinoamericana. En 1951, le fue otorgado el Premio Nacional de Literatura de Chile. Su legado trasciende sus obras escritas, siendo también una figura clave en la promoción de la educación y la cultura en América Latina.
Falleció el 10 de enero de 1957 en Nueva York, Estados Unidos, dejando un profundo vacío en el mundo literario y educativo. Su obra ha sido traducida a más de 20 idiomas y sigue siendo estudiada y admirada en todo el mundo, testimoniando su impacto perdurable en la literatura y la cultura mundial.
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