Lluís Llongueras Batlle nació el 24 de mayo de 1936 en Esparraguera, un pequeño pueblo cercano a Barcelona, España. Desde muy joven, mostró un interés particular por el mundo de la belleza y el estilo, inspirado en gran medida por su padre, un modisto reconocido. A los catorce años, comenzó su carrera como ayudante en la prestigiosa peluquería Can Dalmau, donde aprendió las técnicas que más tarde lo catapultarían a la fama.
En 1958, Llongueras dio un paso crucial al abrir su primera peluquería en Barcelona, lo que marcó el inicio de una expansión que llevaría su marca a tener presencia global. A lo largo de los años, Llongueras no solo se destacó como peluquero sino también como un empresario innovador, abriendo en 1972 el primer salón unisex en España y desarrollando una red de franquicias que eventualmente incluiría más de 120 salones en todo el mundo.
Además de su éxito en el mundo de la peluquería, Llongueras fue un prolífico escritor y educador dentro de su campo. Compiló sus conocimientos y técnicas en varios libros profesionales que se convirtieron en referencias esenciales para estudiantes y profesionales del estilismo. Su influencia también se extendió a otros medios, como la música, donde en 1968 colaboró en la creación de un disco educacional que combinaba consejos de belleza con música popular del momento.
La creatividad de Llongueras no se limitaba al cabello. También exploró otras artes como la fotografía, la pintura, la escultura y el dibujo. Su colaboración con Salvador Dalí en la creación de una gigantesca peluca para el Teatro-Museo Dalí en Figueras es un testimonio de su versatilidad y capacidad para cruzar fronteras artísticas. Esta obra no solo agregó un elemento espectacular a la exposición dedicada a Mae West sino que también ingresó en el libro Guinness de los récords como la peluca más grande del mundo.
Reconocido por su contribución tanto en el ámbito cultural como en el empresarial, Llongueras fue galardonado con varias distinciones, incluyendo la Cruz de Sant Jordi en el año 2000 y la Medalla al trabajo Presidente Macià en 2008. Estos premios reflejan su impacto duradero en la cultura y la economía de Cataluña y de España.
En el plano personal, Llongueras enfrentó desafíos, especialmente notorios en el conflicto legal con su propia hija en 2010, que culminó con un cambio en la gestión de sus empresas. A pesar de estos contratiempos, siempre mantuvo una actitud positiva y conciliadora en público.
Lluís Llongueras falleció el 29 de mayo de 2023 en Barcelona a la edad de 87 años, después de una batalla contra el cáncer de laringe. Su legado perdura a través de sus contribuciones innovadoras al mundo de la peluquería, su influencia en el arte y su incansable espíritu empresarial. La belleza y la creatividad fueron las señas de identidad de su vida y obra, dejando una marca imborrable en todas las disciplinas que tocó.
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