Máximo Gorki

Máximo Gorki, cuyo verdadero nombre era Alekséi Maksímovich Péshkov, nació el 28 de marzo de 1868 en Nizhni Nóvgorod, en el seno del Imperio ruso. Tras la muerte de su padre a temprana edad, Gorki fue criado por su abuela, convirtiéndose en un joven que desde muy temprano experimentó las duras realidades de la vida, dejando la escuela a los doce años y emprendiendo una vida de errante que lo llevó a recorrer vastas zonas de Rusia, acumulando experiencias que más tarde se reflejarían en su obra literaria.

Gorki comenzó su carrera escribiendo para periódicos bajo el seudónimo de Jehudiel Jlamida, pero no fue hasta 1892 que adoptó el nombre de ‘Gorki’, que significa ‘amargo’ en ruso, reflejando su perspectiva crítica hacia la sociedad rusa de su tiempo. Su primer libro, “Ensayos y relatos” (1898), fue un éxito que lo catapultó a la fama literaria. Se destacó por su estilo de realismo socialista, un movimiento literario que él mismo ayudó a fundar y que buscaba mostrar la vida de las clases más desfavorecidas y promover el cambio social.

Sus obras más notables incluyen "Los bajos fondos" (1902) y "La madre" (1907), esta última una novela que Lenin elogió como modelo de literatura proletaria. Gorki no solo fue un prolífico novelista y dramaturgo, sino también un activista político comprometido con la causa socialista, lo que le ocasionó varios periodos de encarcelamiento y exilio. Durante su vida, mantuvo una relación compleja con el poder, siendo crítico del zarismo y, eventualmente, un partidario inicial de la Revolución de 1917, aunque más tarde se desencantaría con el curso tomado bajo Stalin.

Debido a sus disputas con el gobierno, Gorki pasó varios años fuera de Rusia, viviendo en la isla de Capri y en Sorrento, Italia. Sin embargo, en 1932 regresó definitivamente a la Unión Soviética, invitado personalmente por Stalin. Su regreso fue recibido con honores, y su ciudad natal fue renombrada Gorki en su honor. A pesar de su reconciliación con el régimen soviético, las circunstancias de su muerte el 18 de junio de 1936 en Moscú, oficialmente por neumonía, han sido motivo de especulación y controversia.

Gorki dejó un legado literario impresionante, siendo uno de los escritores más destacados y respetados de la literatura rusa, y su influencia se extendió mucho más allá de las fronteras de su país. Fue nominado en varias ocasiones para el Premio Nobel de Literatura, aunque nunca lo ganó. Su obra sigue siendo estudiada y valorada por su crítica social aguda y su profunda humanidad.