Michael Andreas Helmut Ende nació el 12 de noviembre de 1929 en Garmisch-Partenkirchen, Alemania, en el seno de una familia intensamente vinculada al arte. Su padre, Edgar Ende, era un reconocido pintor surrealista, y su madre, Luise Bartholomä, una fisioterapeuta. La influencia de su padre y el ambiente artístico que lo rodeaba durante su infancia y juventud jugaron un papel crucial en el desarrollo de su imaginario creativo.
La vida temprana de Ende estuvo marcada por el contexto político de la Alemania nazi. Participó activamente en el "Frente Libre Bávaro", un grupo antinazi, durante sus años de estudiante. Este compromiso político lo llevó a interrumpir sus estudios y servir brevemente en el ejército alemán durante la Segunda Guerra Mundial. Tras la guerra, la familia se trasladó a Múnich, donde Ende se sumergió en un entorno cultural vibrante que influiría profundamente en su carrera literaria. Entre 1947 y 1950, estudió interpretación en la escuela de Otto Falckenburg en Múnich, lo que también contribuiría a su formación como escritor.
Michael Ende comenzó su carrera literaria escribiendo obras de teatro y actuando en pequeñas producciones. Sin embargo, fue en la literatura infantil y juvenil donde encontró su verdadera vocación. Su primer gran éxito llegó con "Jim Botón y Lucas el maquinista" en 1960, una novela que fue galardonada con el premio Deutscher Jugendbuchpreis y que marcó el inicio de su popularidad. La secuela, "Jim Botón y los 13 salvajes", consolidó su reputación como escritor innovador y creativo.
En 1973, Ende publicó "Momo", una novela fantástica que aborda temas profundos como el tiempo y la modernidad. "Momo" fue seguida por "La historia interminable" en 1979, posiblemente su obra más famosa. Esta última novela explora la relación entre la fantasía y la realidad a través de la aventura de un niño que se adentra en un mundo mágico contenido en un libro misterioso. Ambas obras fueron adaptadas al cine, aunque Ende expresó su descontento con la adaptación cinematográfica de "La historia interminable".
Además de sus novelas para niños, Ende escribió libros para adultos, obras de teatro y ensayos. En su narrativa, utilizaba un lenguaje rico y evocador, creando mundos detallados que desafiaban la imaginación del lector. Sus libros se caracterizan por su profundidad temática y su crítica a la sociedad moderna, explorando temas como la alienación, la burocracia y la pérdida de la individualidad.
Michael Ende falleció el 28 de agosto de 1995 en Filderstadt, Alemania, a los 65 años, debido a un cáncer de estómago. Su legado como uno de los escritores más importantes de literatura fantástica y juvenil del siglo XX sigue vivo, y sus obras continúan siendo leídas por nuevas generaciones en todo el mundo. En reconocimiento a su contribución a la literatura, el Michael Ende Museum fue inaugurado en Múnich en 1998, ofreciendo a los visitantes una visión completa de su vida y obra.
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