Rubén Ochandiano de Higes nació el 3 de octubre de 1980 en Madrid, España. Desde joven mostró un interés profundo por las artes escénicas, lo que lo llevó a formarse en interpretación, canto y danza contemporánea con diversos maestros. Posteriormente, completó su formación en actuación bajo la tutela de Juan Carlos Corazza, uno de los pedagogos más reconocidos en el ámbito teatral español.
Ochandiano comenzó su carrera en la televisión con roles episódicos en series como Médico de familia y Periodistas. No obstante, su primer papel relevante llegó con la serie juvenil Al salir de clase, aunque decidió abandonarla para dedicarse al cine. Esta decisión marcó un antes y un después en su trayectoria, permitiéndole trabajar con algunos de los directores más destacados tanto a nivel nacional como internacional.
En el cine, su debut fue en la película Flores de otro mundo (1999) de Icíar Bollaín, que fue galardonada en el Festival de Cannes. Luego, trabajó en películas como El corazón del guerrero (2000) y Silencio roto (2001), por la cual recibió una nominación al Premio Goya como mejor actor revelación. Rubén también destacó en películas internacionales, trabajando bajo la dirección de cineastas de la talla de Pedro Almodóvar en Los abrazos rotos (2009), Steven Soderbergh en Che y Alejandro González Iñárritu en Biutiful (2010).
A lo largo de su carrera, Ochandiano no solo ha sido reconocido por su actuación, sino también por su labor detrás de las cámaras. Dirigió el cortometraje El paraíso, el cual recibió varios premios en festivales internacionales. En el teatro, no solo ha actuado sino que también ha dirigido, destacándose su puesta en escena de La gaviota de Antón Chéjov en 2011 y Antígona de Jean Anouilh en 2013.
Además de su trabajo en cine y teatro, Ochandiano ha incursionado en la literatura, publicando su primera novela, Historia de amor sin título, en 2012. También ha colaborado como articulista para importantes publicaciones como El País, Vanidad y Vanity Fair, mostrando su versatilidad y compromiso con las artes y la cultura.
En resumen, la carrera de Rubén Ochandiano se caracteriza por una constante búsqueda de nuevos desafíos y medios de expresión artística, consolidándolo como uno de los actores más versátiles y respetados de su generación en España.
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