Lena, una apasionada estudiante de Bellas Artes, descubre a Kenny en Samydeanart, una red social dedicada al intercambio artístico entre creadores de diversas disciplinas. Durante tres años, Lena admira en silencio el talento de Kenny hasta que, impulsada por la reciprocidad en el seguimiento, decide enviarle un mensaje. Este es el inicio de una amistad digital que, con el tiempo, se transforma en una conexión profunda. La oportunidad de conocerse en persona surge cuando Kenny regresa a Barcelona, ciudad en la que Lena reside.
Kenny, quien lucha contra una enfermedad muscular crónica que lo confina a una silla de ruedas y le provoca constantes dolores, se encuentra a menudo hospitalizado. Es en este entorno, lejos del ideal para un primer encuentro, donde Lena y Kenny se ven cara a cara por primera vez. A pesar de los desafíos de su condición, Kenny recibe una esperanza renovada cuando un nuevo tratamiento comienza a mostrar efectos positivos, animándolo a planear una vida fuera del entorno hospitalario.
En un giro del destino, Lena, que vive sola en Barcelona, y Kenny deciden convertirse en compañeros de piso. Esta decisión, aunque práctica, plantea una pregunta crucial: ¿podrán mantener su amistad o la convivencia intensificará sus sentimientos hacia algo más profundo? "3 noches en Oslo", narrada desde las perspectivas alternas de Lena y Kenny, permite a los lectores adentrarse en los pensamientos y emociones de ambos personajes, una elección narrativa que enriquece la comprensión de sus acciones y decisiones.
La enfermedad de Kenny es tratada con una sensibilidad exquisita por parte de Paula Gallego, quien logra transmitir la complejidad de vivir con un dolor crónico. Esta representación honesta y sin filtros ayuda a los lectores a empatizar profundamente con su situación. En cuanto a la relación entre Lena y Kenny, se desarrolla con una naturalidad loable, lejos de los clichés románticos tóxicos, presentando una evolución amorosa basada en el respeto mutuo y la complementariedad de sus diferencias.
El arte juega un papel fundamental en la vida de ambos personajes, no solo como forma de expresión individual, sino también como un vínculo que fortalece su relación. A través de sus creaciones, Lena y Kenny no solo se comunican y se comprenden mejor, sino que también encuentran en el arte un refugio y una fuente de curación emocional. Este elemento, intercalado hábilmente en la trama, subraya la importancia del arte en la interpretación y confrontación de las realidades internas y externas de los personajes.
