'Adoración', obra maestra de Jacinto Benavente, estrenada en 1948 en el Teatro Cómico de Madrid, sumerge al espectador en un drama apasionante que explora las profundidades del amor, el sacrificio y la redención. Ambientada en una España de época, la pieza teatral se desenvuelve en un escenario donde el crimen y los secretos familiares se entrelazan en una danza macabra.
La trama se inicia con un evento trágico: el asesinato de Isidoro tras una acalorada discusión con su esposa Eulalia. Este acto violento desencadena una serie de confesiones y decisiones que pondrán a prueba la moralidad de los personajes. Rosendo, un hombre que profesa un amor inquebrantable por Eulalia, se ve arrastrado al centro de la tormenta. En un gesto extremo de devoción, él se autoinculpa del crimen para proteger a la mujer que ama, sin saber que su sacrificio desencadenará una cadena de eventos que cambiará la vida de todos los involucrados.
Conforme avanza la obra, Eulalia se enfrenta al peso de sus actos y decide confesar la verdad: fue ella quien mató a Isidoro. Su confesión es doblemente dolorosa, ya que no solo debe admitir su culpa, sino también desvelar las razones que la llevaron a cometer el acto fatal. La revelación tiene un efecto catártico, permitiendo que Eulalia busque el perdón de sus hijos y el consentimiento para vivir su amor con Rosendo, libre de la sombra del engaño y la culpa.
Benavente, a través de una estructura de prólogo y dos actos, crea un tejido complejo de emociones y dilemas éticos. Los personajes, interpretados por figuras prominentes de la escena teatral de la época como María Palou y Teófilo Palou, son meticulosamente construidos para evocar empatía y reflexión en el público. 'Adoración' no solo es una historia sobre el amor y sus sacrificios, sino también una crítica a las convenciones sociales que a menudo dictan nuestras acciones y decisiones.
Dirigida por Felipe Sassone, 'Adoración' se convirtió en un reflejo de la maestría de Benavente para explorar los recovecos del alma humana, consolidándose como una pieza crucial en el repertorio teatral español del siglo XX.
