"Caballos desbocados", la segunda entrega de la tetralogía "El mar de la fertilidad" de Yukio Mishima, es una novela que explora la evolución de Japón desde una perspectiva profundamente ideológica y crítica. Publicada en 1969, esta obra se sitúa dieciocho años después de los eventos de "Nieve de primavera", en un Japón convulsionado por crisis económicas y cambios políticos drásticos. A través de esta narrativa, Mishima no solo continúa con su exploración de temas como la pureza, el honor y la belleza, sino que también introduce una crítica aguda a una sociedad que percibe como moral y espiritualmente decadente.
El protagonista, Isao Iinuma, es un joven ardiente y idealista que, desilusionado con el estado de su país, se ve involucrado en un complot para asesinar a figuras políticas corruptas que considera han traicionado al Emperador. Esta trama no solo refleja las tensiones de la época, sino que también prefigura el trágico destino del propio Mishima. La inclusión de la narrativa "La Liga del Viento Divino", que relata la caída de los samuráis, añade una resonancia histórica y una profundidad simbólica a la lucha de Isao por adherirse a ideales aparentemente obsoletos en un mundo que cambia rápidamente.
Más allá de su intriga política, "Caballos desbocados" se despliega como una novela de formación y una exploración psicológica. Mishima examina meticulosamente la evolución de Isao, abordando temas como la pérdida de la inocencia, el conflicto generacional y el impacto de la historia personal y colectiva en la identidad. La novela también sobresale por su rica narrativa y estilo, que oscila entre el lirismo poético y escenas de intensa brutalidad, reflejando así el contraste entre la belleza idealizada y la cruda realidad.
En términos estructurales, Mishima arriesga con un formato que incluye un "libro dentro del libro" y segmentos de interrogatorios judiciales, lo que enriquece la textura narrativa y subraya la complejidad de los temas tratados. "Caballos desbocados" no sólo es una continuación de "Nieve de primavera", sino una expansión y profundización de la visión del mundo de Mishima, ofreciendo una mirada más completa y matizada sobre las preocupaciones recurrentes en su obra.
Para una apreciación plena de "Caballos desbocados", es recomendable haber leído "Nieve de primavera", ya que varios personajes y temas se extienden y desarrollan a lo largo de la tetralogía. La figura de Isao actúa como una especie de reencarnación de Kiyoaki, el protagonista del primer libro, mientras que el personaje de Shigekuni Honda proporciona un hilo conductor a través de la serie, ofreciendo continuidad y profundidad a la rica tapestría que Mishima teje en su último y más ambicioso trabajo literario.