En "Casi", Jorge Bustos se adentra en las profundidades de una realidad a menudo ignorada en el corazón de Madrid, donde las sombras de los sinhogar se alargan bajo el esplendor del Palacio Real. A través de sus páginas, Bustos despliega una investigación periodística de un año que se transforma en un relato literario conmovedor, explorando la vida de aquellos que han sido desplazados al margen más crudo de la sociedad: los sintecho.
Este grupo, compuesto por individuos cuya existencia se reduce a la mera supervivencia, sigue creciendo en silencio dentro de la vibrante vida urbana. El autor, que por circunstancias personales terminó viviendo cerca de este colectivo, fue capturado por la dignidad herida de estas personas, una dignidad que desafía las percepciones convencionales y la política superficial para interpelar directamente a la conciencia del lector.
Con una prosa que evoca la tradición de grandes literatos que han retratado las "llagas de la España negra", Bustos no ofrece condescendencia ni sentimentalismo barato, sino un testimonio directo y sin filtros de la desolación y el abandono. Pero "Casi" es más que un documento sobre la desesperanza; es un esfuerzo por devolver a los sintecho lo que la sociedad les ha arrebatado después de un techo: su voz.
Este libro no pretende ser únicamente un registro de la adversidad, sino un medio para hacer visible lo invisible, como destaca Javier Cercas en el prólogo. A través de un lenguaje que recupera la humanidad de sus sujetos, Bustos logra un equilibrio entre el rigor periodístico y la belleza literaria, ofreciendo un retrato íntimo y detallado de una crisis humanitaria en curso. La obra de Bustos es un llamado a reconocer y enfrentar una realidad dolorosa, invitando a los lectores a reflexionar sobre la esencia de la dignidad y la solidaridad humana.
Con "Casi", Jorge Bustos no solo confirma su habilidad para narrar historias que importan, sino que también se establece como una voz crucial en la literatura contemporánea española, capaz de trazar los contornos de un problema social con la precisión de un periodista y la sensibilidad de un poeta.