En "Confesión", León Tolstói, el aclamado autor de "Guerra y paz", nos sumerge en las profundidades de su crisis existencial y espiritual en el apogeo de su éxito literario y material. A pesar de su fama y fortuna, Tolstói confiesa sentir que su vida ha sido una "broma estúpida y cruel", lo que lo lleva al borde del suicidio y a cuestionar el verdadero significado de la existencia humana.
A través de una introspección intensa y dolorosa, Tolstói explora las diversas filosofías, religiones y disciplinas científicas de su tiempo, buscando respuestas a las preguntas fundamentales sobre la vida, la muerte y el propósito moral. Sin embargo, encuentra que muchas de estas explicaciones son insatisfactorias, aumentando su desesperación y sentido de vacío interior. La obra es una representación vívida del agudo sufrimiento psicológico que experimenta y su lucha por encontrar un sentido que trascienda el materialismo y el éxito superficial.
La redención para Tolstói llega en forma de una renovación espiritual, inspirada por la fe y las prácticas simples de los campesinos rusos, quienes, a su parecer, encarnan una conexión más auténtica y sagrada con la vida. Esta conversión espiritual no solo transforma su entendimiento de la religión y la moralidad, sino que redefine su visión del mundo y su obra literaria. La simplicidad, la humildad y la profunda fe de los más humildes se convierten en el faro que guía el resto de su vida y escritura.
"Confesión" no es solo un relato autobiográfico de una crisis personal; es también una crítica filosófica y teológica profunda que desafía al lector a reflexionar sobre cuestiones universales de la vida y la mortalidad. A pesar de que algunos fragmentos pueden parecer densos o confusos, la sinceridad y la urgencia en la búsqueda de respuestas de Tolstói hacen de esta obra un testimonio conmovedor y revelador de su lucha interna y su eventual iluminación espiritual.
En última instancia, "Confesión" es una obra que trasciende la narrativa personal para tocar las fibras más profundas de la condición humana, invitando a cada lector a confrontar sus propias inquietudes existenciales y a buscar, al igual que Tolstói, un camino hacia la comprensión y la paz interior a través de una vida auténtica y comprometida moralmente.