En "Cuando se borran las palabras", Rafel Nadal teje una narrativa conmovedora que explora la fragilidad de la memoria y el poder eterno de las historias contadas. Esta obra, que cierra su trilogía sobre la saga familiar que comenzó con "Cuando éramos felices" y continuó con "Días de champán", se convierte en un homenaje a las generaciones pasadas y un testimonio vibrante que lucha contra el olvido.
El libro nos sumerge en la vida de un narrador que, enfrentándose a la pérdida gradual de los recuerdos familiares, decide emprender la tarea de registrar lo poco que queda antes de que se desvanezca completamente. A través de sus páginas, Nadal captura momentos efímeros y personajes que, aunque desaparecen en la bruma del tiempo, reviven con cada palabra escrita. La obra se convierte así en un acto de rescate, donde cada relato es una luz que se opone a la oscuridad del olvido.
Utilizando una prosa delicada y emotiva, Rafel Nadal nos ofrece un espejo donde se reflejan no solo los rostros de sus antepasados, sino también los nuestros. La novela aborda temas universales como la identidad, la pérdida y la esperanza, invitando al lector a reflexionar sobre su propia historia familiar y la importancia de conservarla. Con cada página, "Cuando se borran las palabras" nos recuerda que somos, en gran medida, la memoria de aquellos que vinieron antes que nosotros y que, en las historias que compartimos, encontramos la promesa de inmortalidad.
Publicada por Ediciones Destino y magistralmente traducida por Concepció Cardeñoso Saenz de Miera, esta obra no solo concluye una trilogía, sino que también se erige como un testimonio de la capacidad de la literatura para trascender el tiempo y el espacio. "Cuando se borran las palabras" es, sin duda, un libro indispensable para quienes valoran el poder de la memoria y el arte de contar historias.