'El pretendiente americano', publicado en 1892, es una obra maestra de Mark Twain que combina su distintivo humor paródico con una aguda crítica social. La novela sigue las aventuras del joven Berkeley, primogénito del noble conde de Rossmore, quien viaja a Estados Unidos con el propósito de devolver su título y fortuna al supuesto legítimo heredero, el excéntrico coronel Mulberry Sellers. Sellers es un personaje pintoresco, conocido por sus absurdas invenciones, su rol como vidente y sus intentos fallidos como asesor financiero.
La trama da un giro cuando un incendio fortuito obliga a Berkeley a asumir una nueva identidad y enfrentarse al desafío de ganarse la vida por sus propios medios. Paralelamente, Sellers, en su incesante espera de la herencia que nunca llega, emprende una serie de estrambóticas empresas para mejorar su suerte. Desde la captura de un peligroso atracador de bancos hasta la idea descabellada de materializar espíritus para emplearlos como mano de obra barata, Sellers no escatima en ingenio o métodos.
Para llevar a cabo sus planes, Sellers cuenta con la leal colaboración del comandante Hawkins, un congresista de poca monta y ferviente discípulo del pretendiente americano. Juntos, sus peripecias desatan una serie de situaciones cómicas y equívocas, que, aunque descritas como hilarantes, invitan más a la sonrisa cómplice que a la risa incontrolable.
Twain, con su estilo característico, ofrece una parodia que va más allá de la mera comedia, explorando temas de relevancia social que continúan resonando en la actualidad. A través de su narrativa delirante, Twain realiza referencias críticas a la "casta" y los derechos dinásticos, desafiando las nociones tradicionales de nobleza y legitimidad.
La novela es un testimonio del talento visionario de Twain, quien logra tejer una historia rica en humor y crítica social. 'El pretendiente americano' es una invitación a reflexionar sobre las estructuras sociales, el poder del ingenio humano y la búsqueda de identidad en un mundo lleno de absurdos.