En "El Golem", obra magistral de Juan Mayorga, nos adentramos en una historia que trasciende lo cotidiano para sumergirse en las profundidades de la influencia de las palabras en nuestra existencia. Ambientada en un contexto de crisis sanitaria donde la sanidad pública se encuentra al borde del colapso, seguimos la vida de Ismael, un paciente aquejado por una enfermedad rara y su esposa Felicia, quien se enfrenta a un dilema moral y existencial insólito.
Ismael está a punto de ser expulsado del hospital debido a la saturación del sistema, pero a Felicia se le presenta una oportunidad inesperada: si memoriza un texto desconocido, Ismael podrá mantener su cama y recibir el tratamiento necesario. Lo que en principio parece una tarea simple, se convierte en un viaje transformador para Felicia. A medida que internaliza las palabras del texto, experimenta cambios radicales en sus sueños, memoria, imaginación, cuerpo y voluntad, descubriendo el poder latente de las palabras para moldear no solo el pensamiento, sino la esencia misma de quien las pronuncia.
La obra, dirigida por Alfredo Sanzol y representada en el emblemático Teatro María Guerrero de Madrid, explora la rica polifonía de significados del mito del Golem. Este ser, creado a partir de la arcilla y animado por palabras místicas, se convierte en una metáfora de la humanidad misma—seres conformados y condicionados por narrativas ajenas, que repetimos sin plena consciencia de su origen o su impacto.
Mayorga, con su característico estilo que desafía las expectativas del público y lo invita a una reflexión profunda, no busca ofrecer respuestas definitivas sino abrir un espacio para el cuestionamiento a través de la multiplicidad de interpretaciones que suscita "El Golem". En esta fábula político-filosófica, el espectador se enfrenta al desafío de contemplar cómo las palabras configuran realidades, identidades y destinos, dejando un veredicto que es tan personal y variado como el público que asiste a la obra.
"El Golem" de Juan Mayorga no solo es un drama teatral, sino una invitación a reconocer y reevaluar el poder que ejercen las palabras en nuestras vidas, un poder capaz de crear, transformar y a veces, destruir. Una obra que, sin duda, deja una marca indeleble en el espectador, alentándolo a ponderar la resonancia de lo que dice y lo que escucha en el vasto teatro del mundo.