"El imperio de la fortuna", basado en el guión "El gallo de oro" de Juan Rulfo y adaptado por Paz Garciadiego, es un drama profundo y conmovedor que explora la intersección entre el destino, la ambición y la tragedia. La película, dirigida por Arturo Ripstein, se sumerge en la vida de Dionisio Pinzón, un hombre discapacitado y en condiciones de pobreza que vive en un pequeño pueblo mexicano junto a su madre. Dionisio, cuya principal ocupación es la de pregonero, encuentra un giro inesperado en su suerte cuando asiste a una pelea de gallos.
El destino interviene cuando Lorenzo Benavides, dueño de un gallo perdedor, se lo entrega a Dionisio. Contrario a lo que se esperaría, Dionisio decide no comerse al gallo, sino curarlo y entrenarlo. Este gallo, transformado bajo el cuidado de Dionisio, se convierte en un campeón, cambiando radicalmente la fortuna de su dueño. Con su nuevo éxito, Dionisio recorre ferias y pueblos, apostando y ganando, lo que lo lleva a acumular riqueza y a cambiar su estatus social.
En su ascenso, Dionisio se entrelaza con La caponera, una atractiva cantante de feria, interpretada por Blanca Guerra, cuya relación inicialmente despectiva hacia él cambia después de que ella termina su relación con Lorenzo Benavides. La caponera, vista por Dionisio como un talismán de buena suerte, se convierte en su compañera sentimental y más tarde en su esposa, cuando él decide retirarla del entorno bohemio y licencioso en el que ella prosperaba. Sin embargo, este intento de aislarla lleva a un deterioro de su felicidad y, consecuentemente, a la ruina de la fortuna de Dionisio.
"El imperio de la fortuna" es una narrativa visualmente rica y emocionalmente compleja que explora cómo la fortuna puede cambiar drásticamente la vida de un individuo, para mejor o para peor. La película, que no utiliza escenas de estudio y se filma en locaciones reales del Estado de Tlaxcala, ofrece una mirada auténtica y cruda a la vida rural mexicana y a las pasiones humanas que la inflaman. Con un final que revela la efímera naturaleza de la riqueza y el éxito, Ripstein y Garciadiego nos entregan una obra maestra que refleja las eternas luchas de la condición humana.
