"El Libro de las Bestias" de Ramon Llull es una fábula política y social que se inscribe dentro de "El Libro de las Maravillas". Este texto, compuesto en el siglo XIII por el filósofo y místico mallorquín Ramón Llull, destaca por su originalidad y su profunda crítica hacia la tiranía y el abuso de poder. Llull, utilizando animales como protagonistas, encarna en ellos las pasiones y vicios humanos, un recurso que permite una exploración más libre y audaz de temas políticos y éticos.
La obra se centra en la figura de Félix, quien, durante su viaje por el mundo, se topa con una congregación de animales que se disponen a elegir a su rey. El león es elegido, pero al excluir a la astuta zorra de su corte, desencadena una serie de intrigas por parte de esta. El zorro, personaje central de la trama, encarna la ambición desmedida y la manipulación, utilizando el engaño y el miedo para intentar ascender al poder. Su lucha por dominar a los demás y su eventual fracaso ilustran la peligrosa seducción del poder y las consecuencias de la deshonestidad y la traición.
La historia no solo sirve como entretenimiento, sino que también actúa como una herramienta de enseñanza moral y política. Llull dedicó el libro a Felipe IV de Francia, con la intención de ofrecer lecciones sobre la gestión justa del poder y la importancia de la prudencia en la elección de consejeros y colaboradores. A través del destino del zorro, Llull advierte sobre los riesgos de confiar ciegamente en aquellos que buscan el poder por medios ilícitos.
En "El Libro de las Bestias", Llull combina hábilmente elementos de fábulas tradicionales con una narrativa intensamente política, creando una obra que trasciende el tiempo en su relevancia. Su habilidad para entrelazar lecciones éticas con historias cautivadoras hace de esta obra un valioso testimonio de la literatura medieval y un espejo de las luchas políticas universales.