En "El niño y el basilisco", Luis Eduardo Aute nos transporta a Manila en 1945, una ciudad devastada por la guerra. A través de una fotografía de su infancia, el autor nos invita a mirar a través de los ojos de un niño que observa el mar, ignorante del caos que lo rodea. Esta imagen sirve como punto de partida para una profunda reflexión sobre la inocencia perdida y las cicatrices que deja la guerra.
Aute explora cómo este momento histórico y personal se convierte en un punto de inflexión en su vida. La batalla de Manila, una de las más sangrientas del Pacífico durante la Segunda Guerra Mundial, se cobra la vida de más de cien mil personas, y marca al niño de manera indeleble. Desde esta experiencia traumática, la figura del basilisco comienza a acecharlo. Este ser mitológico, representado como una serpiente alada que puede matar con la mirada, simboliza la transición abrupta hacia el mundo adulto, lleno de degradación y muerte.
El libro no solo es una exploración de los recuerdos de infancia de Aute y su confrontación con la muerte y la destrucción, sino también una crítica a la pérdida de la inocencia y la brutalidad del crecimiento bajo circunstancias extremas. A través de su narrativa, Aute intercala recuerdos personales con reflexiones filosóficas sobre la naturaleza humana y la sociedad, ofreciendo una mirada introspectiva y a veces dolorosa sobre lo que significa crecer.
Publicado por Demipage, "El niño y el basilisco" se acompaña de un DVD de la película, permitiendo una experiencia multimedia que enriquece la percepción del lector. Este trabajo meticuloso refleja la habilidad de Aute como dibujante y cineasta, transformando un formato cinematográfico en una obra literaria profunda y conmovedora. La combinación de texto e imagen invita al lector a una inmersión total en la historia, haciendo de esta obra una exploración única de la memoria y la historia personal ligada a un evento histórico devastador.
