En "El tercer disparo", Luis Herrero teje una apasionante trama de suspense y misterio político que captura la esencia de la corrupción y la manipulación en las altas esferas del poder en España. La historia comienza con Fernando, un joven fotógrafo en prácticas en el diario El Sol, quien se encuentra en una loma al amanecer, cumpliendo la promesa de vigilar el nido de un águila imperial por lealtad a un amigo. A través del teleobjetivo de su cámara, Fernando presencia un atropello en una desolada carretera comarcal, convirtiéndose así en un testigo incómodo de un suceso que pronto descubrirá que es mucho más que un simple accidente.
El incidente desencadena una serie de eventos que arrastran a Fernando a una peligrosa investigación en el corazón de la política española. Detrás del atropello, se ocultan historias de traiciones y deslealtades en las que están implicados los más altos cargos del gobierno, quienes se encuentran en una lucha desesperada por mantener el control del poder. Cada personaje es una pieza en un complejo tablero de ajedrez, donde las estrategias se basan en la manipulación y la venganza, y donde el precio de la traición puede ser fatal.
Luis Herrero, con su vasta experiencia como periodista político, ofrece en esta novela una crónica novelada de los oscuros entresijos del poder, con una narrativa que combina elementos reales con ficción, desafiando al lector a discernir entre ambos. La novela está repleta de acción trepidante, giros inesperados y descripciones meticulosas de los escenarios políticos, proporcionando una visión crítica y profundamente entretenida de la cara oculta de la política española contemporánea.
"El tercer disparo" no solo es un thriller político, sino también un estudio sobre el costo humano de la ambición desmedida y el poder. A través de la lente de Fernando, y su transición de fotógrafo a investigador involuntario, Herrero plantea preguntas sobre la moralidad, la lealtad y el sacrificio personal en un mundo donde las apariencias a menudo ocultan realidades corruptas. Con esta obra, Luis Herrero confirma su habilidad para crear una narrativa que no solo entretiene, sino que también invita a la reflexión y al cuestionamiento de la realidad política que nos rodea.