"Escritos de un Salvaje" es una obra trascendental que sumerge al lector en la mente y el corazón de Paul Gauguin, uno de los artistas más enigmáticos y revolucionarios del siglo XIX. Este libro, estructurado en cuatro partes principales, sigue las etapas vitales y creativas de Gauguin, desde su vida en Francia hasta sus famosas estancias en Tahití y otros rincones de Oceanía.
El prólogo, escrito por M.ª Dolores Jiménez-Blanco, establece el contexto biográfico y artístico necesario para comprender la complejidad de Gauguin, un hombre que a menudo oscilaba entre la realidad y la construcción de su propio mito. A través de una cuidadosa cronología, el lector puede seguir los viajes de Gauguin que marcaron su evolución artística y personal. La obra no solo desentraña el mito que envuelve su figura, sino que también permite entender las razones detrás de su decisión de alejarse de Europa, en busca de una pureza artística y personal, lo cual alimentó la leyenda del "artista salvaje".
En la primera sección, "Francia", Gauguin narra su vida en la metrópoli europea, su desilusión con el arte académico y la sociedad industrializada, factores que lo impulsaron a buscar un nuevo significado en lugares remotos. La segunda parte, "Primera estancia en Tahití", es quizás la más reveladora, pues en ella Gauguin detalla sus impresiones y experiencias en la isla, la interacción con sus habitantes y cómo estos elementos influyeron profundamente en su estilo y temáticas. Sus textos reflejan un profundo respeto y una fascinación casi mística por las culturas no occidentales.
La tercera sección, "Regreso a Francia", es un relato introspectivo de su breve regreso a Europa, marcado por un sentimiento de alienación y la firme convicción de que su verdadero lugar estaba en los mares del Sur. Finalmente, "Segunda estancia en Oceanía" cierra el ciclo de sus escritos, mostrando un Gauguin aún más integrado en el entorno oceánico, dedicado no solo a la pintura sino también a la escritura, la escultura y otras formas de expresión artística.
Este libro no solo es una autobiografía o un diario de viajes; es una ventana a la alma de un artista que desafió las convenciones de su tiempo para encontrar un nuevo lenguaje visual y espiritual. A través de sus páginas, Gauguin dialoga no solo con contemporáneos como Van Gogh sino con todo aquel que se atreva a cuestionar las verdades establecidas y buscar su propia ruta en el arte y la vida.