En "Ética sin moral", Adela Cortina Orts plantea un profundo análisis sobre la crisis del orden moral en la sociedad contemporánea, especialmente en un contexto saturado de discursos sobre la moralidad pero vacío de prácticas éticas concretas. Publicado por la editorial Tecnos, este libro de 320 páginas se adentra en la complejidad de la ética en tiempos donde predominan la postfilosofía y el escepticismo hacia los grandes relatos morales tradicionales.
Cortina, en su obra, desgrana la tendencia actual de reducir la ética a meros cálculos utilitaristas o a diluirla en debates políticos y jurídicos, dejando de lado el núcleo esencial de lo moral. Con una perspectiva crítica hacia los enfoques que proponen una "ética sin metafísica" o una "ética sin religión", la autora defiende la necesidad de un orden moral robusto que no se limite a ser un subproducto de la política o del derecho.
La estructura del libro se articula en torno a varias secciones clave que exploran desde la necesidad de justificar lo moral en una era de desencanto filosófico hasta la propuesta de una ética que recupere el lugar central de la persona como sujeto autónomo y solidario. Cortina argumenta que la democracia genuina solo puede fundamentarse en estos principios, donde la autonomía y la solidaridad no solo coexisten, sino que se potencian mutuamente.
"Ética sin moral" no es solo un diagnóstico de los tiempos actuales, sino también un llamado a recuperar una dimensión ética que contribuya a una sociedad más justa y humana. Adela Cortina nos invita a reflexionar sobre cómo las éticas contemporáneas, desde el utilitarismo hasta la ética discursiva, a menudo fallan en abordar las verdaderas cuestiones morales que enfrentamos, y cómo podríamos reconstruir un orden moral en el que verdaderamente se pueda confiar.
Este libro es esencial para filósofos, sociólogos, políticos y cualquier persona interesada en entender los desafíos éticos de nuestro tiempo y en buscar caminos para superarlos. Con un lenguaje claro y accesible, Cortina demuestra por qué la ética necesita de la moral para no perder su sentido y su relevancia en la construcción de una sociedad democrática auténtica.
