En "Ideas para una nueva política cultural", Fernando Sánchez Dragó ofrece una reflexión profunda y provocadora sobre el estado actual de la política cultural en España y propone caminos innovadores para su revitalización. Este libro, escrito con la perspicacia y el estilo característico de Dragó, no solo analiza los problemas contemporáneos, sino que también sugiere soluciones prácticas que desafían el status quo y buscan transformar de manera fundamental la forma en que la cultura es percibida y gestionada en el país.
Dragó comienza el libro con un diagnóstico crítico de la política cultural actual, argumentando que se ha vuelto demasiado burocrática y desconectada de las necesidades reales de los artistas y del público. Critica la distribución ineficiente de los recursos y la falta de apoyo a las nuevas formas de expresión artística, lo que, según él, está llevando a una esterilización de la creatividad. Su análisis no deja piedra sin mover, abordando desde la financiación de las artes hasta la educación cultural en las escuelas.
La propuesta central del libro es una política cultural que priorice la autonomía del artista y fomente una mayor participación del público general en las actividades culturales. Dragó aboga por un modelo de gestión cultural más descentralizado, en el que las decisiones se tomen lo más cerca posible de la comunidad artística y los consumidores de cultura. Argumenta que esto no solo hará que la cultura sea más accesible, sino que también permitirá que surjan nuevas formas de arte más relevantes para las comunidades locales.
Uno de los capítulos más innovadores del libro discute el uso de la tecnología en la difusión cultural. Dragó propone la creación de plataformas digitales gestionadas por el Estado que permitan a los artistas mostrar su trabajo directamente al público, sin intermediarios. Esto, según él, democratizará el acceso a la cultura y ayudará a los artistas a ganar una mayor visibilidad y autonomía económica.
Finalmente, Dragó no se olvida de la importancia de la educación, dedicando un capítulo entero a la reforma del sistema educativo para integrar más y mejor la enseñanza artística y cultural desde edades tempranas. Propone métodos pedagógicos que fomenten la creatividad y la apreciación crítica, con el objetivo de formar ciudadanos más informados y participativos culturalmente.
En resumen, "Ideas para una nueva política cultural" es un llamado apasionado a repensar y revitalizar la manera en que la cultura es valorada y promovida en España. Con propuestas concretas y una visión clara, Fernando Sánchez Dragó nos invita a imaginar un futuro donde la cultura ocupe un lugar central en la sociedad, accesible para todos y enriquecedora en todos los sentidos.
