En "La isla", una novela de suspense y romance de Heather Graham, nos sumergimos en un misterioso paraíso situado en las cristalinas aguas del sur de Florida. La historia sigue a Beth, una apasionada del buceo que busca desconectar de la rutina junto a su hermano Ben, su sobrina Amber y una amiga de esta. Lo que prometía ser una escapada relajante toma un giro inesperado cuando Beth descubre un cráneo humano parcialmente enterrado en un claro de la isla.
El hallazgo despierta la curiosidad de Beth, quien decide investigar más sobre el cráneo. Sin embargo, su búsqueda se complica con la aparición de Keith Henson, un enigmático buceador que afirma estar en la isla por trabajo. A pesar de su atractivo, Beth desconfía de él, sospechando que podría estar involucrado en oscuros secretos que acechan la isla. La tensión aumenta cuando un joven submarinista es encontrado asesinado en la playa, y Beth se convence de que ambos casos están conectados.
Mientras Beth se adentra más en el misterio, su vida corre peligro. Personas desconocidas intentan detenerla, y ella debe decidir si confiar en Keith, quien a pesar de sus reservas, parece genuinamente preocupado por su seguridad. La relación entre Beth y Keith se intensifica, revelando una atracción mutua que ninguno de los dos puede negar. Keith, luchando con sus propios demonios y secretos, se encuentra dividido entre su trabajo y su creciente amor por Beth.
La historia se desarrolla con un ritmo constante, tejiendo romance y suspense en un escenario idílico pero peligroso. Los personajes secundarios añaden profundidad y tensión a la trama, desde la familia acomodada de Miami hasta otros misteriosos visitantes de la isla. Cada capítulo desvela nuevas pistas y desafíos, manteniendo al lector enganchado hasta el inesperado desenlace.
Heather Graham logra una vez más capturar la esencia del suspense romántico en "La isla", donde los secretos oscuros y los corazones apasionados se entrelazan en una danza mortal. La isla, con su belleza seductora y sus sombras ocultas, se convierte no solo en el escenario de la novela, sino en un personaje en sí mismo, lleno de enigmas por resolver. Una lectura intrigante que confirma a Graham como una maestra del género.