En "La lluvia de azogue", el autor Ignacio Ramírez nos sumerge en un misterioso y casi olvidado episodio de la historia natural de México. Este libro, que se basa en el peculiar fenómeno meteorológico ocurrido en San Ignacio en 1872, donde, contra toda expectativa, cayó del cielo no agua, sino mercurio, nos ofrece una ventana a la intersección de la ciencia, la historia y el misterio. A lo largo de sus páginas, Ramírez, conocido como el Nigromante y una figura prominente de la Reforma en México, comparte sus investigaciones y reflexiones sobre este insólito evento, registrado equivocadamente en las efemérides oficiales como sucedido en mayo, pero que él asegura ocurrió el 29 de enero de ese año.
El libro no solo documenta el evento en sí, sino que también explora las reacciones de la comunidad científica y la prensa de la época, tanto local como de la capital del país. Ramírez, en su meticulosa investigación, recopila artículos de periódicos y testimonios de testigos, intentando desentrañar el cómo y el porqué de este fenómeno. En su famoso discurso ante la Sociedad de Geografía y Estadística de México en 1873, el Nigromante expone sus hallazgos y teorías, sugiriendo que el mercurio, aunque escaso en el universo, podría revelar mucho sobre los procesos geológicos y atmosféricos desconocidos hasta entonces.
Además de su valor científico, "La lluvia de azogue" es un estudio sobre cómo los eventos naturales pueden ser interpretados de múltiples maneras, dependiendo de los prejuicios y el conocimiento de una época. Ramírez, fiel a su reputación de liberal y reformador, cuestiona no solo las explicaciones científicas disponibles sino también las supersticiones y mitos locales que surgieron alrededor del evento. Su análisis va más allá del hecho científico, para adentrarse en una reflexión filosófica sobre la relación entre el hombre y los fenómenos que no puede controlar ni explicar completamente.
Este libro es indispensable no solo para los interesados en la historia natural o la ciencia, sino para cualquiera que aprecie las historias que nos hacen cuestionar nuestra percepción de la realidad. "La lluvia de azogue" es una obra que desafía nuestros límites del conocimiento y nos invita a mirar el cielo y la tierra con nuevos ojos, preguntándonos qué más sobre nuestro mundo aún queda por descubrir y entender.