"Las luces de febrero" de Joana Marcús es el esperado desenlace de la saga "Meses a tu lado", que ha capturado los corazones de innumerables jóvenes lectores. En este cuarto volumen, nos sumergimos en las vidas paralelas de Ellie y Jay Ross, dos personajes cuyos destinos están marcados tanto por sus pasiones personales como por los obstáculos que deben superar.
Ellie Ross, cuya vida gira en torno al baloncesto, tiene un sueño claro: ser la primera chica en integrar el equipo de su ciudad. Sin embargo, se topa con un obstáculo significativo: Víctor, un antiguo conocido con el que tuvo una relación tumultuosa y con quien no habla desde los quince años. A lo largo de la narrativa, Ellie se enfrenta a desafíos que ponen a prueba su determinación y habilidades, llevándola a cuestionar no solo sus metas, sino también sus emociones y relaciones. La intensidad de la competencia y la dinámica con Víctor evolucionan de la rivalidad al compañerismo y, posiblemente, a algo más profundo.
Por otro lado, Jay Ross se centra en su familia, especialmente en el cuidado de su abuela. Su vida toma un giro inesperado con la llegada de Nolan, el nuevo y carismático cuidador que parece perfecto en todo sentido. Jay se encuentra en una búsqueda personal para encontrar su propósito de vida, navegando a través de conflictos internos y externos que lo desafían a reconsiderar lo que realmente valora.
La novela no solo es una historia sobre el deporte y la competencia, sino también sobre la búsqueda de identidad, el amor, la familia y la superación de los prejuicios. Cada personaje se enfrenta a sus propias crisis existenciales, lo que añade una rica capa de profundidad a sus respectivos viajes. A medida que se acercan las luces de febrero, un evento anual que simboliza la esperanza y los nuevos comienzos, Ellie y Jay deben decidir qué deseos son los que verdaderamente anhelan cumplir.
Con una mezcla de drama, romance y momentos de autodescubrimiento, "Las luces de febrero" promete ser una conclusión emotiva y satisfactoria para los seguidores de la saga. Marcús no solo entrelaza hábilmente las vidas de sus protagonistas, sino que también invita a los lectores a reflexionar sobre sus propias luchas y aspiraciones. Un cierre poderoso para una serie que ha resonado con tantos jóvenes.
