En "Los nombres y el tiempo", Antonio Moreno nos invita a sumergirnos en una exploración poética profundamente introspectiva y reflexiva. Este libro, que marca el regreso del autor al mundo de la poesía tras un significativo silencio creativo, se presenta como una colección de versos que emergen casi espontáneamente, reflejando un encuentro renovado con lo esencial de la vida y el lenguaje.
Publicado el 1 de marzo de 2010 por Tusquets Editores dentro de la serie "Nuevos Textos Sagrados", este volumen compacto de 96 páginas es una obra que desafía las convenciones del género poético. Moreno, nacido en Alicante en 1964 y con una aclamada trayectoria literaria, explora en estas páginas la naturaleza efímera y a menudo intangible de las palabras, cuestionando su propia capacidad de capturar la esencia de los momentos y las emociones que las inspiran.
La obra se estructura alrededor de la idea de que el tiempo y los nombres que damos a las cosas, a los lugares y a las emociones son en sí mismos constructos que nos ayudan a dar sentido a nuestra existencia. A través de un lenguaje que oscila entre lo lírico y lo cotidiano, Moreno teje un tapiz de imágenes y sensaciones que invitan al lector a reflexionar sobre su propia relación con el pasado, el presente y los nombres que damos a lo que experimentamos.
La presentación del libro, sencilla y sin pretensiones, refleja la filosofía de Moreno de volver a lo básico, lo que se complementa con su decisión de publicar en la colección "Marginales", conocida por acoger obras que se sitúan en los bordes de la corriente literaria principal. Este enfoque minimalista no solo es evidente en el diseño del libro, sino también en la forma en que Moreno aborda temas universales con un estilo despojado y directo.
"Los nombres y el tiempo" no solo es una reflexión sobre la poesía y su proceso creativo, sino también un diálogo con el lector sobre cómo las palabras y los recuerdos se entrelazan, formando la tela de nuestra comprensión del mundo. A lo largo de sus páginas, Antonio Moreno consigue no solo escribir poesía, sino también invitar a una meditación sobre la poesía misma, haciendo de este libro una lectura esencial para aquellos que buscan profundizar en la naturaleza del lenguaje y la experiencia humana.