"Mi Santander, mi cuna, mi palabra" es una evocadora obra del célebre poeta español Gerardo Diego, que nos sumerge en un recorrido lírico y personal por la ciudad que lo vio nacer. A través de sus páginas, Diego teje un vínculo profundo entre su identidad y su lugar de origen, Santander, comenzando desde sus primeros recuerdos en la tienda de tejidos de sus padres, ubicada en la casa familiar de la calle Atarazanas. Este establecimiento no solo representa un espacio físico, sino que se convierte en una fuente de inspiración poética que resurge en su obra.
Desde su ingreso en el Instituto General y Técnico de Santander, donde fue influenciado por figuras académicas clave como Narciso Alonso Cortés, hasta la culminación de sus estudios en la Universidad de Deusto y luego en Madrid, Diego se forja un camino literario marcado por un profundo amor por las letras y una incansable búsqueda de innovación poética. Su obra refleja no solo un profundo conocimiento de la poesía del Siglo de Oro, sino también una exploración constante de nuevas formas y estilos, como evidencia su interacción con movimientos de vanguardia y figuras contemporáneas a él, como Vicente Huidobro y José María de Cossío.
En "Mi Santander, mi cuna, mi palabra", Diego ofrece un tributo a su ciudad natal no solo como un espacio geográfico, sino como un paisaje emocional y creativo que ha moldeado su voz poética. El libro también actúa como un diálogo entre el pasado y el presente, donde cada poema y cada recuerdo construyen un retrato del Santander de su juventud, lleno de nostalgia pero también de un profundo respeto y amor por su herencia cultural.
Este libro es esencial no solo para los admiradores de la poesía de Gerardo Diego, sino para cualquiera interesado en cómo los lugares que habitamos nos conforman y se entrelazan inexorablemente con nuestra obra y nuestra palabra. A través de sus versos, Diego logra que Santander cobre vida, invitando a los lectores a explorar no solo la ciudad, sino también el vasto paisaje de su poesía, tan intrínsecamente unida a la tierra que le dio vida.