Publicada en 1888, "Miau" es una novela destacada dentro del ciclo de las "Novelas españolas contemporáneas" del célebre escritor Benito Pérez Galdós. Este relato, enmarcado en el realismo literario, ofrece una crítica mordaz y satírica del entorno burocrático de Madrid a finales del siglo XIX, explorando las complejidades y las injusticias del sistema a través de la vida de Ramón Villaamil, un exfuncionario del Ministerio de Hacienda que se ve envuelto en una red de intrigas que lo dejan sin empleo.
La obra fue redactada en un periodo de cinco semanas, entre diciembre de 1887 y febrero de 1888, y sufrió múltiples revisiones antes de su publicación. A pesar de que Galdós describió "Miau" como una obra "ligera", recibió el reconocimiento de otros literatos de la época, como José María Pereda y Leopoldo Alas, "Clarín", quienes apreciaron su profundidad y maestría narrativa.
La trama se desarrolla en un Madrid que sirve como telón de fondo para las vidas entrecruzadas de dos familias que están vinculadas por la administración del estado. El protagonista, Villaamil, junto con su familia, lucha por mantener un semblante de dignidad y normalidad ante la adversidad financiera y social. La historia se enriquece con personajes como Doña Pura y Milagros, quienes acentúan el tono tragicómico de la novela a través de sus esfuerzos vanos y a menudo cómicos por ascender en la escala social.
Uno de los personajes más intrigantes y simbólicos de "Miau" es Luisito Cadalso, nieto de Villaamil. A pesar de su juventud y su fragilidad física, Luisito posee una rica imaginación y una conexión espiritual que lo distinguen. Sus conversaciones con un dios que le promete intervenir, aunque finalmente revela la dolorosa verdad de la impotencia y la inevitabilidad del destino, añaden una capa de profundidad filosófica y emocional a la narrativa.
El título "Miau" no solo refleja el maullido de un gato, sino que también encapsula críticamente las características felinas de los personajes femeninos y un enigmático proyecto profesional de Villaamil. Este proyecto, descrito por las siglas M.I.A.U., simboliza sus aspiraciones utópicas de reforma y justicia que, lamentablemente, se ven frustradas por la realidad de su mundo burocrático y corrupto.
En conclusión, "Miau" no es solo una obra sobre la burocracia y sus falencias, sino también un estudio sobre la naturaleza humana, la lucha por la supervivencia y la ironía de las aspiraciones frente a la realidad. Galdós, con su estilo perspicaz y su habilidad para entrelazar lo trágico con lo cómico, presenta una obra que sigue siendo relevante en su exploración de la justicia y la moralidad.
