En "Primero como tragedia, después como farsa", Slavoj Žižek explora con agudeza los grandes fallos del liberalismo y del capitalismo moderno, utilizando como ejemplos clave los ataques del 11 de septiembre y la crisis financiera global de 2008. A través de una crítica incisiva, Žižek cuestiona por qué, si fue posible movilizar miles de millones de dólares para salvar bancos, no se ha hecho un esfuerzo similar para abordar problemas críticos como la pobreza mundial y la crisis ambiental.
Este libro se sustenta en la famosa idea de Marx de que la historia se repite, "primero como tragedia, después como farsa". Žižek argumenta que el liberalismo ha fracasado en dos frentes en la era contemporánea: como doctrina política y como teoría económica. Los eventos de la primera década del siglo XXI sirven como punto de partida para esta discusión, invitando a una reflexión sobre cómo estos marcos ideológicos han sido incapaces de prevenir o manejar adecuadamente las crisis que marcaron este período.
Además, el autor no solo se limita a criticar, sino que también propone una reinvención de la izquierda. Žižek llama a un rediseño de las estrategias y teorías de la izquierda, adaptándolas a las condiciones actuales y emergentes del mundo. Este cambio es visto como esencial para superar el chantaje liberal y moralista que, según él, ha dominado la política global. La obra es una mezcla de análisis político y económico, teoría crítica y filosofía, todo presentado con el estilo provocativo y a menudo polémico que caracteriza a Žižek.
El libro está estructurado en dos partes principales que tratan temas como el capitalismo socialista, la crisis como terapia de shock, el resurgimiento del comunismo y la crítica al capitalismo con "valores asiáticos" en Europa. Cada capítulo no solo profundiza en la teoría, sino que también examina casos prácticos y ejemplos actuales, lo que hace que la discusión sea relevante y accesible para quienes están interesados en las dinámicas del poder, la economía y la política en el mundo contemporáneo.
"Primero como tragedia, después como farsa" es, en última instancia, una obra crucial para entender los fallos del pasado y presente político y económico, y es una llamada urgente a repensar y reestructurar la izquierda global en respuesta a las crisis que enfrentamos hoy en día.