Publicado en el crepúsculo de su vida, "Rimas humanas y divinas del licenciado Tomé de Burguillos" es una obra que encapsula la madurez y la introspección de Lope de Vega, uno de los pilares del Siglo de Oro español. A través del heterónimo Tomé de Burguillos, Lope presenta un poemario dividido en dos secciones distintas pero complementarias, que reflejan las dualidades de la experiencia humana: lo profano y lo divino, lo trivial y lo trascendental.
La primera parte del libro, las "Rimas humanas", constituye la mayoría de los poemas y se centra en temas profanos a través de 161 sonetos y el poema narrativo "La Gatomaquia". Esta sección no solo sirve como un medio de entretenimiento, sino que también actúa como vehículo para la crítica literaria y social. Lope utiliza el humor y la parodia para cuestionar las convenciones del petrarquismo y el gongorismo, dos corrientes poéticas dominantes de la época, promoviendo en su lugar un estilo más natural y accesible, reminiscente de Garcilaso de la Vega.
En contraposición, las "Rimas divinas" son exploraciones más breves y concentradas de la espiritualidad y la religión. Con solo once poemas, esta sección ofrece una meditación sobre la fe y la devoción que contrasta profundamente con el tono juguetón y a veces irreverente de las rimas humanas.
El poemario no solo refleja las preocupaciones literarias de Lope, sino que también es un espejo de su vida personal marcada por amores tardíos, dificultades económicas, y tragedias familiares. Este contexto vital aporta una profundidad emocional a los poemas, que son al mismo tiempo un escaparate del virtuosismo de Lope y una ventana a su alma en los años crepusculares de su vida.
En su conjunto, "Rimas humanas y divinas del licenciado Tomé de Burguillos" se erige como un testimonio de la evolución poética de Lope de Vega y una obra significativa dentro de la literatura barroca española. Es una lectura esencial para aquellos interesados en la poesía del Siglo de Oro y en la compleja interacción entre la vida del poeta y su obra.