"Si te tientan mis labios", de Eleanor Rigby, nos sumerge una vez más en la irresistible atmósfera del romance victoriano, donde la intriga y las pasiones desbordadas se entrelazan con el destino de personajes marcados por sus turbulentos pasados. Esta segunda entrega continúa explorando las complejidades del amor y el poder en una era llena de rigideces sociales y secretos ocultos.
El protagonista, Bastian Carstairs, es un enigma dentro de los oscuros rincones de Londres. Con la apariencia de un ángel pero el alma de un demonio, Bastian no solo ha sabido sobrevivir en las sombras sino que se ha enriquecido gracias a ellas. Respetado y temido en igual medida, su vida transcurre entre el lujo y el peligro, sin que nada ni nadie parezca capaz de perturbar su imperio de criminalidad. Sin embargo, su fortaleza se ve amenazada cuando Merry Goody, una mujer con un espíritu indomable y una historia de desprecios y adversidades, entra en su vida. Merry no es solo una distracción, sino una obsesión que lo llevará al límite de su control.
Merry, por su parte, encuentra en Bastian no solo a un protector sino a un hombre capaz de respetar su integridad y desear su consentimiento antes de sucumbir a la tentación. Pero a medida que su relación se profundiza, los enemigos de Bastian ven en Merry un blanco perfecto para herirlo. El juego del amor y el poder se convierte en una partida de ajedrez donde la reina es, sin duda, la protectora del rey. Pero en este juego peligroso, incluso la reina más astuta puede encontrarse en jaque.
Con un estilo envolvente y detallado, Eleanor Rigby teje una narrativa que captura la esencia del romance histórico mientras explora temas de redención, valentía y la eterna lucha entre el deseo y el deber. "Si te tientan mis labios" promete ser una lectura apasionante para los aficionados del género, ofreciendo no solo un vistazo a las complicaciones del corazón humano sino también un retrato vívido de una época donde el amor podía ser tanto un refugio como un campo de batalla.