En la novela "Un alma cándida" de Elizabeth Taylor, somos testigos de la vida de Flora, una encantadora y enigmática mujer inglesa, desde el día de su boda con Richard. Flora, conocida por su sublime belleza y por ser un ejemplo perfecto de la "English rose", ha sido criada en un entorno privilegiado, protegida de las asperezas de la vida. A lo largo de la narración, Taylor nos presenta a Flora como una persona que, aunque aparentemente desconectada de la realidad y las luchas de los demás, se esfuerza por mejorar la vida de quienes la rodean, convencida de que sus intervenciones son siempre para su beneficio.
La novela es rica en personajes y se despliega en un entorno muy coral, aunque Flora actúa a menudo como un nexo entre ellos. Exploramos la vida de sus familiares más cercanos, como su madre, la señora Secretan, quien, tras enviudar, ha dedicado su existencia a cuidar y adorar a Flora, viéndola como la perfección personificada. La transición de la señora Secretan a una vida sin Flora en casa está marcada por un sentimiento de vacío y falta de propósito.
Richard, el esposo de Flora, aunque menos desarrollado, es descrito como un hombre decente con algunos secretos que podrían no ser del todo benignos para su matrimonio. En el entorno familiar también encontramos a Percy Quatermaine, el suegro viudo de Flora, y a Barbara Goldman, su compañera, cuya relación es vista con desaprobación social por no estar casados. Flora, incapaz de resistirse a intervenir, se inmiscuye en su relación con consecuencias que el lector deberá descubrir.
Además del ámbito familiar, Taylor nos introduce en las vidas de otros personajes significativos, aunque Flora es a menudo la conexión entre ellos y la influencia en sus historias. A medida que avanza la trama, la percepción de Flora comienza a cambiar. Lo que inicialmente parece una aura de perfección empieza a desvanecerse, revelando a una Flora más compleja y tangible, que refleja las imperfecciones y desafíos de la vida real. Este cambio en la percepción de Flora es clave para entender la profundidad y la maestría con que Elizabeth Taylor retrata sus personajes y sus interacciones en esta envolvente novela.
Con "Un alma cándida", Elizabeth Taylor ofrece no solo un retrato vívido de una mujer y su impacto en los que la rodean, sino también una exploración de las normas sociales y las expectativas familiares, todo ello enmarcado en una prosa elegante y un agudo sentido de observación que captura la complejidad de las relaciones humanas.